La Junta de Extremadura permite, desde el 26 de agosto al 17 de septiembre, la media veda en la región, durante los sábados, domingos y festivos. De este modo, autoriza la caza de la tórtola común, palomas, estornino pinto, grajilla, urraca, ánade real y zorro.

A través de un comunicado, la ONG reclamó la correcta aplicación de la Ley de Caza de Extremadura, que en su Título VI contempla la prohibición de la caza en "los días de fortuna", es decir, en los que, como consecuencia de distintos avatares negativos, como las sequías, los animales se ven privados de sus facultades normales de defensa y se concentran de forma obligatoria en determinados lugares.

En este sentido, Ecologistas en Acción de Extremadura recordó que "llevamos dos años de sequía en la que las distintas especies se encuentran sometidas a un fuerte estrés", de tal forma que añadir un componente más, como es la caza, en un sistema en un difícil equilibrio "ayudará de forma irreversible a que nuestra naturaleza pierda el valor que todos debemos preservar, especialmente la Administración con una gestión responsable".

La asociación no cree que sea suficiente disminuir el período de caza, tal y como se hizo la temporada de 2005, en la que se suspendió la última semana.