Se trata de Segurfondo Inversión y Segurfondo Inmobiliario, ambos perteneientes al grupo Inverseguros; Banif Inmobiliario (Banco Central Hispano) y Argentaria Propiedad, perteneciente al grupo bancario público. Pendiente de autorización se encuentran Bamanda, patrocinado por el banco de fortunas Privanza, del grupo BBV.

El único requisito pendiente para los cuatro primeros fondos de inversión inmobiliaria españoles es que presenten la documentación que les ha solicitado el órgano supervisor, necesaria para la inscripción en el Registro creado por la CNMV para este tipo de nstituciones.

En paralelo, la Comisión también debe aprobar las gestoras que administrarán este nuevo instrumento financiero. Así, Inverseguros Gestión ya ha obtenido la autorización para administrar Segurfondo Inversión y Segurfondo Inmobiliario. Por su parte, Banif Inmobiliario estará gestionado por Banif Inmobiliaria, y Argentaria Propiedad por Argentaria Gestión.

Pendiente de autorización se encuentran en este momento las gestoras Gestión de Activos Inmobiliarios (que se ocupará del fondo de rivanza, Bamanda), Central Hispano Gestión, Credigés (perteneciente a un grupo de cooperativas de crédito) y una gestora patrocinada por Caixa Catalunya.

El Grupo Inverseguros, que con dos fondos pretende ser pionero y cabeza de este nuevo segmento financiero, está presidido por Vicente Abiol y en su consejo figuran los grupos aseguradores AGF, Winterthur, Aegon, Reaseguros Bilbao, Musini, Allianz, Catalana de Occidente, Intercaser y otros.

Los fondos de inversión inmobiliaria, tras una larga gesación en el seno del Ministerio de Economía, llegan precedidos por una importante polémica entre los especialistas. La liquidez de los mismos, así como los intrumentos de tasación de su patrimonio y la actualización de dicha tasación, son los principales puntos de controversia del nuevo instrumento financiero.