Estos datos suponen que uno de cada seis contraros temporales suscritos en 1999 se suscribió a través de estas empresas, que gestionan el 17por ciento de la temporalidad existente.

Además, durante el último cuatrimestre del año, periodo en el que entró en vigor la reforma de la ley que regula esta actividad profesional, en comparación con el mismo ciclo de 1998, se produjo un descenso del 4 por ciento en el número de contrataciones a través de las ETT.

Para la presidenta de la asociación, Inés Ortega, "el descenso de un 4% de nuestras contrataciones, justo en los cuatro meses posteriores a la entrada en vigor de la reforma, puede sercalificado positivamente, ya que los primeros estudios presagiaban una caída en torno al 20%. Esto demuestra que los empresarios españoles continúan confiando en el valor añadido y en la profesionalidad de nuestro trabajo".

Ortega explicó que espera que se corrija este marco legal, "a fin de que dichos sobrecostes discriminatorios, que suponen aproximadamente una carga adicional de un 6 por ciento para las empresas que contratan a las ETT, no incidan negativamente en la contratación a través de nuestrs empresas en los próximos meses, una vez que ha quedado demostrado que no es el bajo coste salarial lo que induce a nuestros clientes a recurrir a los servicios de las ETT".