Según informó este lunes la comisión, en concreto, la sanción impuesta a Correo Inteligente Postal asciende a 186.668 euros, mientras que Hispapost reconoció su responsabilidad durante el procedimiento sancionador y abonó una multa de 44.000 euros.

El procedimiento sancionador se inició tras conocer que la Policía había encontrado una cantidad indeterminada de envíos de correspondencia abandonados a la intemperie en Palma de Mallorca. El procedimiento penal finalizó sin que pudiera identificarse a las personas que abandonaron efectivamente las cartas.

Correo Inteligente Postal era el operador a cuyo cargo estaban las cartas en el momento en que fueron abandonadas, mientras que Hispapost, era el operador titular de los medios de franqueo de dichas cartas, que había contratado con Correo Inteligente Postal su entrega en Islas Baleares.

Durante el procedimiento administrativo sancionador, la CNMC determinó que ambos operadores cometieron una infracción muy grave consistente en el incumplimiento del deber de fidelidad en la custodia y gestión de los envíos de correspondencia, que tienen los operadores postales del servicio postal universal.