En estos casos, se declarará “una contingencia migratoria”, ya sea debida a un incremento inesperado en el número de entradas de menores sin adultos de referencia, bien por un flujo de llegadas mantenido en el tiempo.

Esta es la mayor novedad de los planes de emergencia aprobados hoy en la Conferencia Sectorial de Infancia, cuyo objetivo es “asegurar que todos los niños, niñas y adolescentes tienen todos sus derechos garantizados, con independencia de su origen o del lugar de residencia de su familia”.

Además de la derivación, el modelo de acogida para menores no acompañados en situaciones de emergencia aprobado hoy busca asegurar una atención de calidad a todos los niños, con recursos especializados en los puntos de recepción.

En su intervención, la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, quiso dar “las gracias a las comunidades y ciudades autónomas de Canarias, Ceuta y Melilla, por la labor que han realizado” durante tanto tiempo en la acogida de menores migrantes que llegan solos. “Han asumido durante demasiado tiempo un sobreesfuerzo que necesitamos distribuir”, defendió.

“Con los documentos aprobados hoy pretendemos establecer un modelo de colaboración, solidaridad y corresponsabilidad con las comunidades autónomas, a fin de brindar una atención integral de calidad a cada niña y niño”, afirmó la ministra.

En su opinión, “el conflicto de Ucrania ha demostrado que somos capaces de responder ante crisis humanitarias, trabajando juntos y priorizando el interés superior del menor”. “También ha puesto en evidencia la importancia de estar bien preparados y coordinados”, prosiguió, con lo que “ahora debemos aplicar estas lecciones y asegurar que todos los niños y niñas que llegan a nuestro país tienen la atención que necesitan”.

Según el Ministerio, este nuevo modelo “no pretende crear un sistema de protección a la infancia paralelo, sino reforzar el que ya existe mediante una mejor coordinación de los actores y recursos disponibles”.

Se guiará por el interés superior del menor y por los principios de la Convención de Naciones Unidas sobre la Infancia, así como por las leyes nacionales en este terreno. Se apoya asimismo en los principios de no discriminación, integración de los menores, participación social e interculturalidad, al tiempo que propiciará procesos ágiles y efectivos.

El acuerdo alcanzado hoy también prevé mejorar la formación de los profesionales que atienden a estos niños y adolescentes, y establece un sistema de información común sobre los menores no acompañados acogidos en cada comunidad autónoma y los distintos recursos disponibles.

Por último, señala que se prestará especial atención a aquellos colectivos de niños más vulnerables, como víctimas de trata, menores con discapacidad, niñas y adolescentes y solicitantes de asilo.