CATALANAS. PUJOL AFIRMA QUE EL AUTOGOBIERNO AL QUE ASPIRA PARA CATALUÑA REQUIERE LA REFORMA DE 50 LEYES ESTATALES
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El presidente de la Generalitat y candidato a la reelección, Jordi Pujol, manifestó hoy que el nivel de autogobierno para Cataluña al que aspira CiU puede conseguirse sin reformar la letra de la Constitución, pero haciendo una relectura de la Carta Magna que implica la reforma de más de 50 leyes estatales.
Pujol reconoci que ésa es una tarea que no puede conseguirse en una sola legislatura, sino que tiene que realizarse con más tiempo, en una perpectiva a largo plazo, según dijo esta tarde a un grupo de periodistas de Madrid, invitados por el secretario general de Convergencia, Pere Esteve, a pasar un día de campaña con el líder de la coalición nacionalista.
El presidente de la Generalitat anunció que planteará reivindicaciones de tipo económico y político al Gobierno central si resulta vencedor en las elecciones autnómicas del 17 de octubre.
Los esfuerzos de Pujol se centrarán en la negociación del nuevo pacto fiscal que deberá renovar y reformar el actual sistema de financiación autonómica en el año 2001, y en la consecución de mayores cuotas de poder político mediante una relectura de la Constitución que permita aumentar la capacidad de autogobierno sin reformar la Carta Magna.
Vaticinó que el debate en ambos terrenos será difícil porque tanto el PP como el PSOE "rehuyen" la discusión profunda en estas maerias, y reconoció que algunos de los planteamientos de la Generalitat pueden ser "conflictivos para el resto de España".
En materia política, Pujol defendió que la Constitución permite una interpretación más autonomista de la que admite ahora el Gobierno y anunció que la Generalitat seguirá luchando porque se impongan sus tesis, lo que supondría, según sus cálculos, reformar más de medio centenar de leyes estatales.
Para negociar estos dos aspectos, el candidato convergente necesita buenos resulados en las elecciones autonómicas y en las generales del año próximo, por lo que miembros de la dirección de su partido no descartan que en los próximos meses se produzcan algunos gestos que evidencien las diferencias entre CiU y el PP en el ámbito nacional, y faciliten un mejor resultado para los convergentes.
RECRUDECIMIENTO DE LA CAMPAÑA
Jordi Pujol está satisfecho de la marcha de la campaña electoral, aunque se queja de la ausencia de debates sobre contenidos. Espera un recrudecimiento de la baalla electoral durante la próxima semana con la incorporación de líderes nacionales a la contienda. El presidente del Gobierno, José María Aznar; el ex presidente socialista Felipe González; y el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia vendrán en la recta final de campaña a apoyar a los candidatos de sus respectivos partidos.
Se mostró convencido de que tanto populares como socialistas "van a echar el resto" y señaló la paradoja de que ese último esfuerzo lo hagan trayendo "gente de fuera".
n cuanto a posibles pactos poselectorales, Pujol dijo que la sociedad catalana no comprendería que el PP fuera determinante en el gobierno de Cataluña, aunque entiende "e incluso reclama" del Ejecutivo autonómico que contribuya a la estabilidad del Gobierno central.
Por ello, espera conseguir una mayoría suficiente que le permita gobernar en solitario con apoyos puntuales de distintas fuerzas del arco parlamentario catalán, como ha ocurrido en esta legislatura.
En esta recta final de campaña, tod su interés está en movilizar al electorado de CiU. No en vano eligió para su jornada con la prensa nacional una visita a un tradicional feudo de CiU, Gerona.
Sus intervenciones empezaron hoy con retraso tras la suspensión del primer acto de la mañana, a causa de una leve enfermedad de su esposa, Marta Ferrusola, a la que estuvo acompañando durante las primeras horas.
Pasada la una de la tarde, llegó a L'Escala, en donde paseó por la feria de la Anchoa y degustó este típico producto ampurdanés. Drante su paseo se cruzó con el alcalde de Gerona capital y anterior candidato socialista a la Presidencia de la Generalitat, Joaquim Nadal, a quien afablemente rechazó la propaganda electoral del PSC que le ofreció.
Poco después se trasladó a Rosas, en donde asistió a una comida popular con cerca de 1.500 militantes de CiU, a quienes dijo que, a pesar de las encuestas, "no hay nada ganado", y que los votos son "como las clavelinas", que tienen que ser recogidas una a una.
Sin perder de vista en nngún momento que su jornada de campaña estaba siendo seguida por periodistas llegados de Madrid, se dirigió a ellos en castellano: "la imagen que se tiene de Cataluña fuera está deformada. No es lo que se vive aquí. Ahora mismo, estaba yo comiendo y tenía a mi lado derecho a uno de una familia a la que llaman 'los malagueños', que vino con cuatro años y ahora es de Convergencia, es nacionalista y está perfectamente integrado. Luego había otro que me pidió para un consuegro suyo de Sevilla que le firmara alo y más allá otro de Alicante. Y el alcalde de Rosas, que es hijo de un madrileño militar. Todo esto es Cataluña", explicó.
La comida fue rematada con un encuentro informal con la prensa en el que también estuvieron presentes el secretario general de Convergencia, Pere Esteve; el presidente del Consejo Nacional de Unió Democrática de Catalunya, Josep Antoni Durán LLeida; y el candidato número uno por Gerona, Pere Macias. La jornada de hoy termina en Gerona capital, en donde Pujol dará un mitin para halar de sus propuestas sobre residencias de ancianos, ayudas a la familia, guarderías y hospitales, argumentos que vienen siendo centrales en su campaña.
(SERVIMEDIA)
10 Oct 1999
SGR