Según declaró Joaquín Leguina, presidente de la CAM, durante la visita que realizó a las instalaciones, este proyecto es "un negocio rentable y limpio", yaque "produciremos energía alternativa y limpia".

Además, señaló que no hay posibilidad de que estas centrales afecten al nivel de agua de los pantanos, porque "no gastan ese bien natural ni degradan el entorno".

La primera de la minicentrales, en La Pinilla, entrará en funcionamiento en dos semanas y el resto estarán concluidas y en marcha en 1993. Las otras cuatro estaciones hidroeléctricas son las de Riosequillo, El Villar, El Atazar y Puentes Viejas.

La energía producida en estas 5 estacines, además de servir para el autoabastecimiento, puede dar servicio a 12.00 hogares o 50.000 personas cada año, fundamentalmente de pueblos de la sierra madrileña.