El Consejo de los Recursos del Aire californiano, conocido por sus duras sentencias para la limitación de la contaminación producida por los vehículos, ha reconocido los resultados de esta investigación y podría endurecer la prohibición de fumar en vehículos para el transporte infantil y en edificios de apartamentos de alquiler, en un Estado que ya tiene una de las normativas antitabaco más duras de EEUU.

Según el estudio, las fumadoras pasivas menores de 50 años tendrían un riesgo de desarrollar cáncer de mama entre un 68% y un 120% mayor que las que desarrollan su actividad en espacios sin humo.

Sin embargo, los representantes de las empresas tabaqueras creen que la investigación da poca importancia a los estudios que no han encontrado relación entre el humo y el cáncer de mama, una enfermedad que causa la muerte a 40.000 mujeres cada año en Estados Unidos.