La exposición en Malborough duró desde el 10 de mayo al 18 de juni, pero la obra no estaba en venta, puesto que ya se ha vendido a ingleses, americanos y japoneses, fundamentalmente, señalaron las mencionadas fuentes.

"Botero es un caso bastante excepcional. Como había expuesto antes en Nueva York, venía ya vendida de Nueva York, a falta de dos o tres piezas", explicó. En consecuencia, la popularidad que han adquirido las esculturas del paseo de Recoletos no se ha traducido en un aumento de ventas de dibujos en la sala Malborough porque no había casi nada que vender

El portavoz de la galería precisó que las piezas de Fernando Botero son muy cotizadas tanto por "el éxito mundial" como por la escasez de la obra que queda a la venta. Además, el artista realiza cada vez menos pintura, aseguró el representante. "Tengo entendido que ya trabaja cada vez menos y cuando hace la guarda para su colección privada", indicó.