Tras visitar la promoción de casas de la Agencia de Vivienda Social en este distrito de Madrid, Ayuso entregó a cada uno de los nuevos inquilinos las llaves de sus casas y destacó el escenario “muy complicado” que se plantea por “dificultades extraordinarias” derivadas de aumento de los costes de la construcción, la caída del poder adquisitivo de los ciudadanos, así como la subida de precios y tipos de interés.

“Es cierto que esto está sucediendo en toda España y Europa y, por tanto, requiere un esfuerzo histórico", aseguró. Así, añadió que “frente a los experimentos políticos" el Gobierno madrileño trabajará "sin descanso para que cada vez sean más viviendas las que pueden llegar a los ciudadanos y en las mejores condiciones”.

También volvió a criticar la nueva Ley Vivienda estatal y defendió que "no puede ser peor", con una “intervención salvaje y sin más oferta". "Se han disparado los precios más de un 9%”, advirtió tras manifestar que la Comunidad "tiene como prioridad el continuar con planes para facilitar el acceso a la vivienda, especialmente a los jóvenes y personas con más dificultades".

Los pisos entregados tienen un precio de arrendamiento de 57 euros durante los primeros tres meses y, pasado este periodo, la cantidad se ajustará en función de las condiciones económicas de los inquilinos, si bien no podrá superar los 357 euros, que es la cuantía máxima a pagar.

Estas viviendas cuentan con una superficie de 52 metros cuadrados distribuidos en dos dormitorios, salón, cocina, baño, terraza, tendedero, plaza de garaje y trastero, junto con un sistema de climatización y calefacción que permite regular la temperatura de cada una de las estancias.

En lo que va de año, el Ejeutivo regional ha entregado 117 viviendas en los municipios de Ciempozuelos, Patones de Abajo, Robregordo, Berzosa de Lozoya y Puentes Viejas. A ellas se añaden las previstas próximamente en Majadahonda, Móstoles, Valdemoro, Rivas Vaciamadrid, Villa del Prado, Guadarrama y Madrid.