El pasado lunes, un día antes de que se produjera el derrumbamiento, el Ayuntamiento había cursado, según Castañer, la orden de paralización de las obras de rehabilitación que se estaban realizando, sin licencia, en el edificio siniestrado.

Es más que probable, ha señalado el concejal, que dicha orden no hubiera llegado todavía a manos de los responsables de la empresa Urmaco S.A. , que estaba llevando a cabo las obras. Castañer confirmó que "efectivamente existía un expediente de solicitud de licencia de obras de rehabilitación, en el que los técnicos municipales habían informado de una serie de deficiencias administrativas detectadas, relacionadas con el cumplimiento de la normativa vigente sobre incendios, con la ocupación de los trasteros del inmueble y una tercera relativa a la cesión de viales por parte de la propiedad del edificio".

Sin la subsanación de estas deficiencias, según el concejal, no se podía onceder la correspondiente licencia. El delegado de urbanismo ha querido dejar claro también que "la posesión o no de licencia de obras era algo ajeno a las causas del derrumbamiento del edificio".

El delegado de Urbanismo declaró que, durante el mes de junio, como consecuencia de una inspección municipal, se tuvo conocimiento de que se habían iniciado unas obras en la plaza doctor Landete.

Explicó que el paréntesis estival y la necesidad de realizar los correspondientes informes técnicos fue la ausa de que la orden de paralización, firmada el día 24, no se cursara hasta el 27, un día antes de la tragedia.

Castañer confirmó que la causa del derrumbe ha sido "un colapso de la estructura del inmueble sobre el ue tendrá que dictaminar el juez".

En las tareas de rescate de los tres hombres que resultaron aplastados por el desplome del edificio participaron 50 bomberos del Ayuntamiento de Valencia y 25 del Consorcio Provincial de Bomberos, además del personal de la Contrata Municipal de Derrios.

Los nombres de las víctimas son Juan Vicente Villanova Gabaldón, de 20 años y natural de Burjassot (Valencia), José María Montserrat Mart, de 42 y Vicente Camps, de 45, ambos de Alzira. Los fallecidos serán enterrados esta tarde en sus poblaciones de origen.

Por su parte la Federación de la Construcción de CCOO del País Valenciano se dirigió hoy al ministerio fiscal y a la Inspección de Trabajo para expresar que "no solo la obra no tenía licencia municipal, sino que el incumplimiento empresaral de la normativa vigente en materia de seguridad e higiene era manifiesta en la obra".

Por esa razón, entiende que, "con independencia de la responsabilidad civil o de otra índole, CCOO exige que la empresa debe ser sancionada por la infracción".