La ONG considera que los ataques aéreos han sido acompañados de una operación llamada "humanitaria" con el fin de que la opinión pública acepte los bombardeos.

Para MSF, en realidad no se trata de una operaión de ayuda humanitaria, sino de "una operación de propaganda militar destinada a que la opinión pública internacional acepte el ataque liderado por los Estados Unidos".

MSF considera que el lanzamiento de cajas de medicamentos y raciones alimentarias en medio de los bombardeos no resuelve las necesidades humanitarias de la población y, además, es peligroso. Además, la ONG se pregunta "qué sentido tiene disparar con una mano y proporcionar con la otra material médico".

"¿Cómo podrá saber la poblción afgana en el futuro si tras una propuesta de ayuda humanitaria no se esconde una operación militar?", señaló Eric Stobbaerts, director general de MSF-España. "MSF quiere poner de manifiesto que la confusión entre lo militar y lo humanitario limita las posibilidades de una intervención humanitaria independiente en la región".

Por ello, MSF se opone a la formación de una coalición humanitaria integrada en una acción militar, como han declarado el presidente de los EE.UU., George Bush, y el primer mnistro británico, Tony Blair, y exige una acción humanitaria independiente y neutral.

Médicos Sin Fronteras mantiene operativos la mayoría de sus proyectos en Afganistán y tiene personal y material disponibles en Pakistán, Irán, Tayikistán y Turkmenistán.