En el debate parlamentario todos los grupos fijaron el sentido de su voto, aunque la votación definitiva no se producirá hasta el final de la sesión de hoy, ya entrada la madrugada.

El ministro del Interior, José Antonio Alonso, indicó que se trata de una ley que "hace falta" y agradeció "profundamente" las aportaciones de todos los grupos parlamentarios para mejorar el texto inicial.

"Estoy seguro de que, con esta ley, con la instalación de los radares y con las campañas de control de alcoholemia, de control de velocidad y del uso del cinturones de seguridad y cascos, conseguiremos cumplir los objetivos que nos hemos marcado para reducir los accidentes de tráfico", dijo.

El diputado del PSOE Victorino Mayoral destacó el amplio consenso alcanzado tanto en el Congreso como en el Senado y dijo que entre todos "hemos elaborado una ley necesaria que nos sitúa al nivel de los países europeos más avanzados en la lucha contra la siniestralidad vial".

"Hemos hecho esta ley entre todos: senadores y diputados, desde el grupo mayor hasta el menor y hablando con todo el mundo: transportistas, examinadores, investigadores y demás asociaciones, fundamentalmente las de víctimas" de accidentes, dijo.

Por su parte, el diputado del PP Federico Souvirón indicó que la ley no es como la hubiera redactado el Partido Popular y dijo que hay detalles "que nos gustaría que hubieran mejorado, como la reduccción de las infracciones por las que se quitan puntos".

Sin embargo, anunció el apoyo de su grupo porque esta ley "está llamada a ser un instrumento fundamental para que los ciudadanos tomemos conciencia de que tenemos que tener un papel activo en la seguridad vial".

Los diputados de CiU, ERC, IU, Coalición Canaria y BNG mostraron su alegría por el alto nivel de consenso alcanzado y por la puesta en marcha del carné por puntos. Por su parte, Emilio Olabarría, del PNV, lamentó no poder votar a favor del texto porque, en su opinión, no se han respetado algunas cuestiones "de carácter competencial".

12 PUNTOS

El nuevo carné de conducir dotará a los conductores de un saldo inicial de 12 puntos, que se irán perdiendo en función de las infracciones que vayan cometiendo. Según la gravedad de éstas, se perderán dos, tres, cuatro o seis puntos.

El límite de puntos que se podrán perder en un sólo día es de ocho, salvo que el conductor haya incurrido en infracciones muy graves (conducir borracho o ir en direccción contraria, por ejemplo).

Los conductores que no cometan ninguna infracción en tres años obtendrán 2 puntos adicionales, que podrán llegar a ser un máximo de 3 puntos si se suceden un total de 6 años sin vulnerar la ley. Es decir, el conductor ejemplar podrá llegar a disponer de un crédito de 15 puntos.

La ley presta una especial atención a los conductores profesionales, de forma que cuando pierdan todos los puntos podrán examinarse en un plazo de tres meses, frente a los seis que habrán de esperar el resto de conductores.

Si vuelve a agotar el crédito de puntos, el conductor profesional deberá esperar seis meses, por el año de castigo que espera al resto de conductores.

La puesta en marcha del carné por puntos queda ahora pendiente de la publicación de la entrada en vigor de la ley y del desarrollo reglamentario de la misma, lo que dilatará su funcionamiento hasta finales de año.