Zapatero dedicó una parte importante de su discurso de cierre de la Conferencia Política del PSOE a hablar de la mundialización para cuya gestión es necesario "desarrollar una capacidd mucho más vigorosa de gobernar el proceso".

El líder socialista apostó por el diálogo con todos aquellos grupos sociales que se oponen a la globalización porque ellos, a excepción de los violentos, "están despertando la conciencia de la desigualdad en el mundo" y denuncian un capitalismo que "al amparo de esa revolución tecnológica, que puede ser positiva, sólo genera distancia entre países desarrollados y países pobres".

Esta tarea de control de un proceso que en sí mismo no tiene porqué ser ngativo la debe hacer, a su juicio, el socialismo, "que no es un sociailsmo nuevo es, de nuevo, el socialismo".

Zapatero declaró que el PSOE está radicalmente en contra de la "mundialización del egoismo", pero a favor de la globalización de la lucha contra el sida; que desean la globalización de la justicia y rechazan "la impunidad de los poderosos".

Igualmente, defendió la mundialización de la educación y la tecnología y se manifestó en contra de la genelización de prácticas "que producen desiguadades".

Esta declaración de intenciones que hizo Zapatero en relación a los procesos de globalización incluye la oposición a que los capitales circulen con más libertad que las personas y a que se construyan escudos antimisiles cuando lo importante es globalizar la paz.

Los socialistas quieren promover un sistema de crecimiento sostenible y repetuoso con el medio natural y hacen un alegato contra los países que "con cinismo no quieren suscribir los acuerdos de Kioto".

El secretario general dl PSOE reconoció que muchos ciudadanos, y especialmente los jóvenes, buscan respuestas frente al fenómeno de la globalización que marcará el destino de la mayoría de los pueblos en los próximos años.

En este sentido, aseguró que el socialismo que lidera es una opción con respuestas y soluciones a las frustraciones de muchos ciudadanos y lamentó "profundamente" la muerte de un jóven italiano durante las manifestaciones de ayer en Génova a manos de la policía. Su alusión fue acogida con aplausos del pleario de la Conferencia Política del PSOE.

"Nunca la violencia será el camino que haga el avance hacia la solución de las inquietudes de la gente, que nosotros compartimos en muchos casos", sentenció el líder socialista.