Según el especialista, una de caa cinco personas tendrá más de 65 años en nuestro país a principios del siglo XXI, a lo que ha contribuido la alimentación.

"Los ancianos", explicó el especialista, "no se cuidan por una inadecuada información. Pero en las próximas generaciones, seguro que la cuidaremos más: estamos más mentalizados de la importancia que tiene para la salud una buena alimentación. Una dieta adecuada puede contribuir al control de algunas enfermedades".

El profesor Guijarro ofrece una serie de recomendaciones paraadecuar la alimentación de los mayores que sufren determinadas patologías, ya que es necesario llevar un régimen alimenticio adaptado a sus necesidades y carencias particulares:

- Protección biliar: eliminación de huevos, leche y todo tipo de grasas.

- Enfermedades circulatorias: limitación de grasas animales (cerdo).

- Enfermedades de vesícula: evitar todas las grasas, los huevos, algunas legumbres y prescindir de todo condimento.

- Enfermos con úlcera: tomar leche, huevos e hidrátos d carbono.

- Enfermos de gota: evitar las carnes rojas, el pescado azul, el marisco y el chocolate.

- Diabéticos: eliminar los azúcares y disminuir los hidratos de carbono.

Pero, aunque no se detecten enfermedades, en la dieta de un anciano hay alimentos imprescindibles. Uno de ellos son las legumbres, que "hay que introducir en el plato de honor de la alimentación de los ancianos", según el profesor Guijarro.

De acuerdo con este experto, en la dieta ideal para un anciano nunca podrán fatar los siguientes elementos: yema de huevo, pollo, conejo, vacuno, patatas, pan, arroz, medio litro de leche diaria, frutas y productos vegetales y entre uno y dos litros de agua o zumos.