Esta es la primera vez que la organización, en sus 30 años de historia, hace un llamamiento en este sentido. AI está muy preocupada por cómo la ayuda militar que los americanos dan para luchar contra el narcotráfico está contribuyendo aasesinar civiles desarmados y mantener constantes violaciones de los derechos humanos por parte de los militares colombianos.

Desde que en agosto de 1989 el presidente de USA aprobó el plan Andean Drug Strategy, dirigido a luchar contra el narcotráfico, Colombia ha sido el país del Hemisferio Occidental que más ayuda militar de Estados Unidos ha recibido. Aunque inicialmente va dirigida a controlar las actividades del narcotráfico, los militares la han desviado para controlar a movimientos guerrillero y su entorno, señala AI.

Desde 1986 han sido asesinadas unas 20.000 personas, en su mayoría campesinos, por fuerzas armadas y paramilitares que actuaban en acciones contrainsurgentes, en la gran parte de los casos."Sin duda, las operaciones de contrainsurgencia colombianas son sinónimo de la sistemática violación de derechos humanos", afirma AI.

AI señala también que los sucesivos gobiernos colombianos han ocultado, con la excusa de controlar el tráfico de drogas, la raíz del problema: la masivaescalada policial.

La organización añade que esta situación es desconocida para algunos políticos americanos, por lo que ha dirigido una serie de preguntas al Gobierno americano dirigidas a aclarar cómo se controla que la ayuda destinada se dirija a sus fines establecidos. AI pide también al próximo presidente de Colombia que salga de las urnas, -el próximo mes se celebran elecciones-, que reconsidere esta ayuda militar.