La campaña de este año se iniciará en la Gran Vía Marqués del Turia, donde se produce una acumulación muy grande (unos 9.000 ejemplares) deeste tipo de aves.

Los pájaros viven en los árboles de la calle y tienen especial preferencia por el monumento de Teodoro Llorente, situado en la citada avenida, a la altura del cruce con la calle Pizarro.

Los conductores que aparcan sus vehículos bajo esos árboles se encuentran cada día con sus automóviles repletos de defecaciones de los pájaros, que afectan también a los viandantes. Incluso, los niños se cubren la cabeza con sus carpetas cuando pasan por la zona o mientras esperan que el semáfoo se ponga en verde.

El consistorio valenciano usará métodos que ya ha probado en otras ocasiones para ahuyentar a los pájaros, como lanzar petardos o disparos al aire que asustan a las colonias y les hacen desaparecer por una temporada.