Los agricultores andaluces consideran "catastrófica" la actual situación y sostienen que sólo con fuertes y torrenciales lluvias se podría salvar una parte de la producción.

La escasez de agua que sufre Andalucía está provocando cortes en el suministro de agua en las provincias de Sevilla y Cádiz.

Sevilla contará desde hoy tan sólo con 12 horas de agua después de la entrada en vigor del nuevo hrario de restricciones que va desde las 7 de la tarde hasta las 7 de la mañana.

El ayuntamiento de Sevilla impondrá también desde hoy duras sanciones contra aquellos que incumplan las normas restrictivas en el consumo de agua con multas que alcanzan hasta los 50 millones de pesetas.

Estas medidas adoptadas pretenden alcanzar un ahorro de agua de un 35 por ciento del consumo total para alargar la de esta forma la disponibilidad de agua.

Los pantanos que abastecen a la provincia de Sevilla se ncuentran por debajo del 10 por ciento de su capacidad total, con lo que, según los expertos, sólo queda agua para unos dos meses.

El consejero andaluz de Obras Públicas y Transportes, Juan José López Martos, garantizó hoy la potabilidad y buen estado del agua que se consume en Sevilla.

López Martos desmintió así la denuncia realizada ayer por Izquierda Unida en la que consideraba el agua de Sevilla no potable y de mala calidad.

El titular de Obras Pública afirmó que "ahora más que nunca exite una absoluta garantía sanitaria del agua que se bebe puesto que la Consejería de Salud ha extremado en estos momentos sus medidas de control sobre el agua".

El consejero andaluz de Obras Públicas realizó estas declaraciones en el transcurso de su visita hoy a la estación de bombeo de agua del río Guadalquivir instalada en la localidad sevillana de Santiponce.

López Martos estuvo acompañado en este acto por el alcalde de Sevilla, Alejandro Rojas Marcos, que no quiso pronunciarse sobre las nueva restricciones de agua y la actual situación de la sequía en Sevilla.

Esta estación de bombeo, junto a otra ubicada en la localidad de Camas, permite la captación de agua de emergencia procedente del río Guadalquivir.

Esta toma de agua del río, una vez depurada, puede suponer hasta el 60 por ciento de la que se consume en Sevilla.