Según informó a Servimedia Mario Rodríguez, miembro de Greenpeace, los activistas de la organización ecologista han acampado dentro de un almacén de madera propiedad de la empresa importadora gallega y cuentan con gran cantidad de víveres y agua, ya que la protesta, por el momento, no tiene fecha e finalización.

Greenpeace tiene concertada para esta tarde una reunión con responsables de Maderas Iglesias, a los que la organización ecologista facilitará varios informes propios y del Gobierno de Camerún, que demuestran la actividad ilegal de la compañía Hazim, y pedirá la cancelación de los contratos que unen a ambas empresas.

Rodríguez comentó que "los importadores españoles no pueden escudarse en que es un problema interno de Camerún. Ellos no deben comprar madera a compañías que están actando en ese país africano incumpliendo la ley".

Esta protesta forma parte de las medidas de presión que está llevando a cabo Greenpeace desde principios del mes de julio con el fin de acabar con la entrada en puertos españoles de madera tropical procedente ilegalmente de Camerún.