"Yo No voy a entrar en polémicas políticas sobre algo que no depende de los políticos sino de los jueces", insistió Gallardón en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.

A pesar de que los periodistas insistieron en relación con este tema, el regidor madrileño se mantuvo impasible en su decisión de no introducir "elementos polémicos" y anunció que en las próximas horas el Ayuntamiento se pronunciará sobre el asunto del espionaje, muy probablemente a través del vicealcalde, Manuel Cobo, uno de los miembros del PP presuntamente vigilado.

"Desde el primer día dije que este era un asunto objeto de investigación y que teníamos que estar a lo que dijera la resolución judicial. No seré yo quien introduzca ahora elementos polémicos", reiteró Gallardón.

El alcalde señaló que prefiere hacerlo así porque no cree que lo contrario "sea bueno ni beneficie al Partido Popular" y quiso dejar claro, en este sentido, que la Dirección del PP no ha pedido a sus miembros que guarden silencio sobre el espionaje.