El pasado martes, el bombardeo mató a un paciente e hirió a otro y dos proyectiles causaron ayer daños a la estructura del hospital, según el CICR.

El jefe de la delegación del CICR en Somalia, Pascal Mauchle, aseguró que desde esta organización están "consternados" por esta situación, que, según añadió, es "cada vez más peligrosa para los pacientes y el personal médico".

"A pesar de nuestros repetidos llamamientos a todas las partes en conflicto a respetar el derecho internacional humanitario y de los servicios médicos, nada parece haber cambiado", apostilló.

El CICR y la Media Luna Roja Somalí recordaron a todas las partes en conflicto, tanto el ejército como los rebeldes, que los ataques contra los servicios médicos marcados con el emblema de la Media Luna Roja es una violación del derecho internacional humanitario.

En este sentido, agregaron que todas las partes implicadas en las hostilidades deben tomar todas las precauciones para minimizar el daño potencial a los civiles y sus bienes, como los hospitales.

Keysaney es uno de los dos hospitales apoyados por la CICR en Mogadiscio. Está administrado por la Media Luna Roja Somalí y acepta a todos los pacientes, independientemente de su clan y motivaciones religiosas o políticas.

El Comité Internacional de la Cruz Roja ayuda al hospital con equipamiento quirúrgico, medicamentos y formación de médicos y enfermeras.

Casi 1.400 heridos de guerra han sido tratados en el hospital durante este año, entre elllos más de 300 mujeres y alrededor de 200 niños.