Ahora Madrid votó a favor, el PP y Ciudadanos se abstuvieron y el PSOE se reservó el voto para el pleno ordinario de este mes, que tendrá lugar los días 29 y 30 y aprobará formalmente la retención de estos 173,6 millones.

El delegado del Área, Carlos Sánchez Mato, que llevó a aprobar la retención, comenzó reiterando que en todo momento ha querido cumplir la regla de gasto y que sólo pide que se le aplique a Madrid igual que al resto de municipios, y expresó su respaldo a la comisión transversal compuesta por él y por la alcaldesa, Manuela Carmena; la vicealcaldesa, Marta Higueras, y la portavoz del Gobierno, Rita Maestre, aunque el PP la presentó como un tutelaje al desempeño del delegado.

El portavoz de Ciudadanos en la comisión, Miguel Ángel Redondo, comenzó quejándose de que los datos de las partidas retenidas se le hubieran pasado en formato .pdf y no en hoja de cálculo, y le afeó que cumpliendo la ley habría podido incrementar el gasto en 400 millones en 2019 respecto a 2015.

Así, interpretó que el incumplimiento se debió sólo al supuesto deseo de Sánchez Mato de obtener rédito político en el enfrentamiento, y preguntó si iba a haber recortes en la radio M21, en dinamizadores de culturales y en subvenciones nominativas, porque en partidas sociales y distritos sí los va a haber.

La del PSOE, Érika Rodríguez Pinzón, reiteró su rechazo habitual al cambio del Ministerio en las reglas de juego para “poner palos en la rueda” del Ayuntamiento y certificó que “nos vemos abocados a recortar”, cun una situacion de “incertidumbre” de la que culpó tanto al Gobierno central como el municipal, por haber esperado hasta octubre para aprobar el PEF y no haber visto en Mato ninguna intención de anticiparse ni ninguna convocatoria a la oposición.

EL PSOE, "MUY DISGUSTADO"

“No ha previsto lo que podía ocurrir en esta ciudad”, le recriminó al delegado, añadiendo un reproche al Gobierno municipal por la discriminación a distritos del sur como Villaverde, con 5 de los 18 proyectos congelados (delante de ella estaba el concejal presidente del distrito, Guillermo Zapata, también miembro de esta comisión), y dos escuelas infantiles y 10 millones de transferencias a familias que desaparecen. “Estamos muy disgustados por la forma como se han hecho los recortes”, concluyó, interpretando que estos recortes van a ocultar fallos en la gestión.

El portavoz del PP, Íñigo Henríquez de Luna, que coincidió con Redondo en la dificultad de trabajar con el formato .pdf, dijo que el presupuesto municipal ya es “papel mojado” con las intervenciones de Hacienda por valor de 604 millones en total en 1017 avaladas por la suspensión cautelar de inversiones decretada por el TSJ de Madrid. “El PSOE ahora se cabrea, hasta ahora estaba silbando”, criticó veladamente al socio de gobierno.

Henríquez de Luna enumeró los recortes sociales y en reequilibrio territorial, y las contrapuso a que en publicidad y propaganda sólo se hayan reducido las partidas 400.000 euros de 10 millones, un 4%. En suma, calificó todo de una “vergüenza” e insistió en su tesis de que la alcaldesa, Manuela Carmena, estaría deseando librarse de Sánchez Mato, quien "se ahorca con la soga de su incompetencia".

El delegado contestó que el PP ha hecho de “bombero pirómano” y auguró que tendrá que explicar por qué le “tiene ganas” a la gente de Madrid obligando a reducir inversiones con una “actitud torticera”. Sobre el formato .pdf en que envió los datos, dijo que es el mismo en que el Gobierno central y la Comunidad de Madrid envían los suyos.

Además, puntualizó que el incremento presupuestario hasta 2019 sólo puede ser de 245 millones, no de 400, sumando los sucesivos topes fijados por la regla de gasto, y que con la interpretación de la Airef el Consistorio no habría tenido que aprobar ningún PEF.

En cuanto a la supuesta desconfianza de Carmena, recordó que a día de hoy todavía no le ha cesado y sigue delegando sus poderes en él. Y al PSOE le reiteró que está de acuerdo en las prioridades sociales que alimentaban sus críticas, garantizando que llevará a cabo las inversiones prometidas a pesar del PP.