El presidente de Freixenet, José Luis Bonet, confirmó que el martes se reunirá el Consejo de Administración para decidir si la empresa cambia su sede social de Sant Sadurní d’Anoia (Barcelona) y la establece fuera de Cataluña.

Asimismo, descartó que el posible traslado de la empresa de cava vaya a afectar a la plantilla o la producción. En su lugar, defendió que la decisión supondrá “una protección ante la inseguridad jurídica que en este mismo momento hay en Cataluña y la inestabilidad que existe”.

Freixenet podría seguir la senda de Codorniú, que acordó trasladar la sede social de Barcelona a La Rioja “ante la situación de incertidumbre política y jurídica en la que se encuentra sumida Cataluña y con el objetivo de garantizar los intereses de sus trabajadores y clientes”.

Ya son casi 1.700 las empresas que han salido de la región desde el 1 de octubre, cuando se celebró el referéndum de independencia, según los datos del Colegio de Registradores de España. Entre estas, figuran Banco Sabadell, CaixaBank, Gas Natural, Catalana Occidente, Aguas de Barcelona o Cementos Molins.