Álvarez explicó que ahora se va a negociar “básicamente” sobre la plantilla de los servicios centrales, ya que el tema respecto a las sucursales dependerá de la integración tecnológica, lo que hará que esta parte no se aborde hasta 2019.

Así lo indicó en la rueda de prensa de presentación de resultados de los nueve primeros meses del año, periodo en que el grupo registró un beneficio neto de 5.077 millones de euros, un 10,2% más.

Señaló que los resultados de la entidad son “consistentes, recurrentes y de alta calidad”, además de subrayar que son “crecientes” pues hay una tendencia al alza.

Por su parte, el director financiero del Santander, José García Cantera, destacó que la integración del Popular va bien y que la situación de la entidad “se está normalizando muy rápidamente”. En este sentido, expuso que ya se han recuperado 10.000 millones en depósitos en el Popular y que la evolución del crédito ha comenzado a mejorar.

Sobre este aspecto, Álvarez subrayó que están “satisfechos” con la recuperación de los depósitos, y que ya se ha conseguido la mitad de los 20.000 millones perdidos por el Popular entre diciembre de 2016 y primeros de junio de 2017.

El consejero delegado del Santander indicó que “siempre se recupera más rápido el depósito corporativo”, aunque también se ve una “reacción buena” en el negocio retail, sobre todo en las pymes, que es negocio principal del banco.

“No tenemos una fecha para recuperar los 20.000 millones, pero la tendencia es buena”, aseguró.

Respecto al ‘bono de fidelización’ lanzado para compensar a clientes que compraron acciones del Popular entre el 26 de mayo y el 21 de junio de 2016, indicó que cuenta ya con una aceptación de más del 60% del máximo importe posible de la emisión, aunque medido en clientes el porcentaje es menos.

“Queda mes y medio” de plazo para acogerse, recordó Álvarez, quien agregó que “hay mucha gente que espera hasta el último minuto”, por lo que aseguró ser “optimista”. “Llegaremos a cifras muy atractivas”, comentó, para apuntar que el hecho de que sea menor el porcentaje de aceptación en clientes que en volumen le hace “ser más optimista” pues “la oferta favorece más al pequeño inversor que al grande, así que espero que entren”.

Preguntado por la posibilidad de vender WiZink, filial del Popular, Álvarez apuntó que se tiene que estudiar para decidir qué mantener y qué no, ya que esta sociedad gestiona, por ejemplo, las tarjetas de débito de la entidad y eso se quiere mantener.

En lo que respecta al acuerdo en seguros de Allianz y el Popular, ya que el Santander trabaja con Aegón, dijo que es una situación que aún se tiene que analizar para tomar una decisión.