La malaria era endémica en el Mediterráneo durante el Imperio romano

MADRID
SERVIMEDIA

La malaria estuvo extendida en la isla de Cerdeña (Italia) durante el Imperio romano mucho antes de la Edad Media, como así lo demuestra una investigación realizada por el Instituto de Medicina Evolutiva de la Universidad de Zürich (Suiza) con la ayuda de los restos de un ciudadano romano que murió hace cerca de 2.000 años.

Incluso hoy en día, la malaria o paludismo es uno de los mayores desafíos médicos del mundo, ya que mata a cientos de miles de personas cada año. Esta enfermedad es causada por parásitos del género ‘Plasmodium’, que se transmiten al ser humano por la picadura de mosquitos hembra infectados del género ‘Anopheles’.

Hay cinco especies de parásitos causantes de esta enfermedad, si bien dos de ellas (‘Plasmodium falciparum’ y ‘Plasmodium vivax’) son las más peligrosas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2015 se registraron 214 millones de casos de paludismo que ocasionaron la muerte de unas 438.000 personas, muchas de ellas niños menores de cinco años y sobre todo en África subsahariana.

En el pasado, las personas se adaptaron a la amenaza de la malaria de varias maneras con métodos que van desde intervenciones ambientales como el drenaje de pantanos hasta adaptaciones genéticas en el cuerpo humano.

NO DESDE LA EDAD MEDIA

La malaria fue erradicada en Cerdeña en la década de 1950. Hasta ahora se había asumido que la enfermedad sólo era endémica en esa isla mediterránea desde la Edad Media (entre los años 500 y 1500).

Investigadores del Instituto de Medicina Evolutiva de la Universidad de Zúrich han estudiado más a fondo la historia de la malaria en Cerdeña en un trabajo publicado en la revista ‘American Journal of Physical Anthropology’. Dado que el ADN antiguo de la malaria es muy difícil de extraer, analizaron la talasemia y otras adaptaciones genéticas en su lugar.

Las talasemias son enfermedades genéticas que interrumpen el desarrollo de los glóbulos rojos y tienen la ventaja de que muchas personas afectadas llevan una vida sana y son mal anfitriones de los patógenos de la malaria. Por lo tanto, se vuelven parcialmente inmunes a las infecciones por malaria. Incluso hoy en día, las talasemias se producen con relativa frecuencia en antiguas regiones de la malaria, como el Mediterráneo.

Los investigadores, encabezados por Claudia Vigano y Abigail Bouwman, del laboratorio de ADN humano del Instituto de Medicina Evolutiva (el único laboratorio de este tipo en Suiza), estudiaron un alelo de talasemia llamado ‘cod39 beta-talasemia’, dominante en Cerdeña. Por lo tanto, fueron capaces de demostrar que, contrariamente a lo que se ha sabido hasta ahora, la malaria era probablemente endémica en Cerdeña en el Imperio romano, mucho antes de la Edad Media.

La evidencia decisiva de esta suposición fue proporcionada por los restos de un ciudadano romano que vivió hace unos 2.000 años, concretamente entre el 300 antes de Cristo y el 100 después de Cristo, en el que se pudo probar el alelo cod39.

"Éste es el primer caso documentado de la adaptación genética a la malaria en Cerdeña", asegura Vigano, quien añade: "También descubrimos que la persona era genéticamente sarda con toda probabilidad y no un inmigrante de otro área".

(SERVIMEDIA)
27 Jul 2017
MGR/caa