Los mensajes se centrarán en llamar la atención de los usuarios para que cuiden sus pertenencias y se aseguren de mantener a la vista los cierres de bolsos o mochilas, además de alertarles sobre la escasa seguridad del bolsillo trasero del pantalón.

La campaña incluye una serie de consejos básicos relativos a situaciones cotidianas, que Metro ha visto necesario reforzar para evitar pérdidas y robos. Según informó Metro, "este tipo de avisos y recomendaciones son habituales en otros Metros del mundo, así como en todo tipo de instalaciones por las que pasan miles de personas a diario, como aeropuertos o estaciones de tren".

Esta iniciativa se suma a la puesta en marcha el pasado mes de junio relativa a seguridad y concienciación sobre usos indebidos en las instalaciones de Metro, como viajar entre los acoples de los trenes, cruzar de un andén a otro atravesando la vía o sobrepasar el pavimento podo-táctil situado en el borde de los andenes, especialmente cuando hacen su entrada en las estaciones los trenes.

NOTABLE ALTO EN SEGURIDAD

Todas estas acciones están encaminadas a incrementar la seguridad en la red, implicando a los usuarios en el desarrollo de buenas prácticas.

En la última encuesta de satisfacción realizada por la compañía, los usuarios de Metro calificaron con un notable alto la seguridad en Metro con una puntuación de 7,67 puntos sobre 10. En cuanto a los usuarios extranjeros, la percepción de seguridad es incluso mayor, puntuando la seguridad de Metro con 8,2 puntos.

El Metro de Madrid cuenta con 1.700 vigilantes de seguridad distribuidos en las estaciones y en los trenes de toda la red. Adicionalmente, hay un equipo de vigilantes que se desplaza por la superficie en coche para atender las incidencias de una manera rápida y ágil.

Igualmente, la Brigada Móvil de la Policía Nacional, con más de 100 agentes distribuidos por la red y especializados en combatir el delito en los diferentes sistemas de transportes, se coordina con los efectivos de Metro para una mayor y más rápida actuación en caso de necesidad.

Metro gestiona las incidencias que se producen en la línea a través del Puesto Central de Seguridad, un centro en el que trabajan 18 técnicos especializados las 24 horas del día durante los 365 días del año. Además, cuentan con el apoyo de un oficial del Cuerpo Nacional de Policía.

Los técnicos de Puesto Central de Seguridad son los responsables de activar los recursos externos (112, Samur, Summa, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Policía Local), para que se desplacen hasta el lugar de la incidencia, en caso de que sea necesario.