Acnur informó hoy de que presta ayuda a un 45% de los desplazados, a los que proporciona asistencia básica como alimentos, mantas, colchonetas y utensilios de cocina.

Además, esta agencia de la ONU aseguró que el creciente número de ataques de los rebeldes ugandeses del Ejército de Resistencia del Señor en el noroeste del Congo, que incluyen violaciones, saqueo e incendios de viviendas y secuestros de niños, ha obligado a unos 12.500 civiles a abandonar sus hogares en el último mes.

Según Acnur, el Ejército de Resistencia del Señor ha matado desde septiembre de 2007 a 1.273 personas y ha secuestrado a 655 niños y 1.427 adultos, además de haber violado a muchas mujeres y saqueado y quemado bastantes hogares.

Definió de "dramática" la situación humanitaria en el este de la República Democrática del Congo porque la mayoría de los desplazados internos no puede volver a sus casas por la violencia, de manera que duermen en edificios públicos como escuelas e iglesias y algunos han encontrado refugio en sus amigos, parientes o familias de acogida.

Acnur aseguró que el principal obstáculo para desarrollar su labor humanitaria es la inseguridad en las carreteras, que dificulta la entrega de suministros, y algunas áreas donde se han agrupado desplazados sólo pueden ser accesibles por vía aérea.

Por último, este organismo de la ONU señaló que existe "una urgente necesidad" de entregar mayores volúmenes de artículos de ayuda humanitaria, como mantas, colchonetas, bidones de gasolina, utensilios de cocina, mosquiteras y láminas de plástico para refugios temporales.