Sepúlveda ha dado explicaciones por primera vez sobre la compra de este vehículo de lujo. Relató que el día que se dirigía al concesionario para formalizar la operación de compra, se encontró con Correa en las inmediaciones de la sede del PP, y le acompañó.

Informado de que Sepúlveda iba a comprar el coche a plazos, el cabecilla de la red Gürtel le propuso cerrar la operación él a nombre de sus empresas y salir los dos beneficiados. "A él le venía bien porque podría desgravarse el IVA como gastos de su empresa, y yo me lo ahorraba y no tenía que estar pagando todos los meses. Se lo podría ir dando cuando pudiera”.

Sepúlveda entregó a Correa un BMW que había comprado tres años antes, y que tenía un valor de unos tres millones de pesetas, y pidió un crédito por 18.000 euros con los que fue pagando el resto a Correa. Según la Fiscalía, entre 1996 y 2009 Sepúlveda compró cuatro coches de alta gama, un Jaguar, un BMW, un Chrysler Grand Cherokee y un Range Rover.

Sobre el régimen económico que tenía Sepúlveda con su exmujer, Ana Mato, dijo ante el tribunal que el matrimonio tenía régimen de gananciales, aunque “cada uno tenía su trabajo y recibía sus ingresos. Teníamos total independencia en cuanto a gastos, aunque teníamos gastos comunes, luz, agua, gas, los gastos de los niños, nos los repartíamos. También teníamos una hipoteca común, pero vamos, no estábamos pendientes el uno del otro”.

El exalcalde detalló, además, que como responsable electoral del PP y senador ganaba unos 5.000 euros mensuales y a partir de su elección como alcalde de Pozuelo sus ingresos se rebajaron a 4.000 euros. Además, en 2004 recibió en concepto de herencia tras el fallecimiento de su padre 85.000 euros.

Jesús Sepúlveda reconoció que el cabecilla de la `trama Gürtel´, Francisco Correa, le hizo algunos regalos, pero puntualizó que siempre fue en calidad de “amigo” y que nunca le pidió “nada a cambio”.

Así se ha manifestado Sepúlveda en el juicio que se desarrolla en la Audiencia Nacional sobre la trama corrupta en respuesta a las preguntas de su abogado, el único al que está respondiendo en la vista oral. La Fiscalía pide para él 15 años y cuatro meses de prisión por los delitos de falsedad continuada de documento mercantil, cohecho, fraude continuado a las Administraciones Públicas y malversación de caudales públicos.

Explicó que conoció a Correa en el año 1993, cuando comenzó su colaboración con el PP, del que Sepúlveda era miembro del comité electoral. Al principio su relación fue profesional, pero a fuerza de organiza actos y de viajar juntos acabaron siendo “amigos”.

El exalcalde de Pozuelo negó a preguntas de su letrado haber recibido pagos en metálico de carácter mensual que, según la Fiscalía, le hacía llegar Correa a través su mano derecha en Valencia, Álvaro Pérez `El Bigotes´. “No, nunca me entregó nada”, ha dicho en varias ocasiones antes de destacar que el jefe de la Gürtel y él se veían “si no todos los días, casi todos, si (Correa) huiera querido darme esas cantidades me las habría dado personalmente”.

Negó también haber recibido dos pagos puntuales de 12.000 euros cada uno de manos del 'número dos' de la red, Pablo Crespo. “No, no me han entregado dinero ni el señor Crespo, ni el señor Correa”, insistió.

VIAJES

Sepúlveda explicó que “normalmente, los viajes de familia los organizaba” él a través de la agencia del grupo Correa, Pasadena Viajes 2005, porque le resultaba “cómodo” y le daban “facilidades” al ser la empresa con la que trabajaba el Partido Popular y en la que le conocían.

Aseguró que “hubo algunos viajes que se abonaron en metálico” pero tuvo que “reconocer que en algún momento algún viaje no lo aboné, recuerdo que hablando con Correa me dijo `déjalo que como soy agencia tengo posibilidad de que no me cuesten´… pero los demás, los pagué”.