Así, la cuantía del déficit se ha reducido un 1,2% en comparación con los 10 primeros meses del año pasado, cuando era de 21.920 millones. En lo que se refiere a su equivalencia con el PIB se ha moderado también, pues hace un año era el 2,04% del PIB.

El objetivo de déficit fijado por el Gobierno para este ejercicio de la Administración central es del 1,8% del PIB y del 3,6% para el conjunto de las administraciones públicas, aunque la Comisión Europea ha elevado el margen en un punto adicional, hasta el 4,6%, si bien aún no está acordado su reparto por subsectores.

En concreto, los recursos no financieros han caído un 1,3% (hasta los 148.302 millones) y los empleos no financieros han bajado también un 1,3% (hasta 169.958 millones).

Desde el Ministerio explicaron que la mejora en el déficit del Estado se debe “fundamentalmente” al incremento de la recaudación del segundo pago fraccionado del Impuesto sobre Sociedades, tras la entrada en vigor de la reforma de este tributo.

INGRESOS

Los ingresos por impuestos y cotizaciones ascendieron a 134.955 millones de euros, de los cuales 75.343 millones corresponden a impuestos sobre la producción y las importaciones, entre los que se encuentra el IVA, que creció un 2,1% interanual.

Por su parte, los impuestos corrientes sobre la renta y el patrimonio alcanzaron 53.174 millones. En este grupo de impuestos se encuadra el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, que bajó un 7,7% debido principalmente a la liquidación del sistema de financiación del 2014 que supone unos menores ingresos para el Estado por importe de 2.133 millones y que se compensa, parcialmente, por el incremento de las retenciones del trabajo.

Hacienda explicó que las retenciones del trabajo aumentaron un 2,1%, pese al impacto de la reforma fiscal.

En cuanto al Impuesto sobre Sociedades, Hacienda destacó que este mes creció un 1,1%, debido al efecto registrado en el segundo pago fraccionado.

GASTOS

En el capítulo de gastos, el Ministerio destacó el descenso generalizado en las principales rúbricas, con una disminución del 4,7% de los intereses y del 4,1% en consumos intermedios.

Descendieron también un 0,8% las transferencias corrientes entre administraciones públicas, que son la partida de mayor volumen, debido principalmente a las menores transferencias realizadas al Servicio Público de Empleo Estatal, inferiores en 5.174 millones de euros.

Por el lado de los incrementos, las prestaciones sociales distintas de las transferencias en especie crecieron un 6,4% interanual, consecuencia fundamentalmente del alza de las pensiones de clases pasivas.

También aumentó la remuneración de asalariados en un 0,3% debido a la actualización del 1% de las retribuciones de los empleados públicos en 2016.