Según informó la Policía, la víctima, que responde a las iniciales O.P., piropeó aquella madrugada a un chico que pasaba a su lado, éste se lo tomó mal y le propinó un puñetazo en la cara que le fracturó el tabique nasal y que le hizo perder varios dientes, según conta en el parte médico.

Entonces, el agredido presentó junto a unos testigos y al Observatorio Madrileño contra la LGTBfobia una denuncia en la comisaría de Ronda de Toledo.

La víctima tuvo que recibir asistencia médica debido a las graves lesiones que sufrió. Tras la investigación, que ha durado cinco meses, los agentes de la Brigada Provincial de la Policía Nacional han logrado identificar al posible autor de los hechos, que ha pasado a disposición judicial.

Esta paliza supuso la agresión homófoba número 79 del año 2016, según denunció entonces la asociación Arcópoli. Sin embargo, este colectivo se queja de que solamente el 18% de este tipo de agresiones se denuncian.