El Congreso rechaza que el Gobierno elabore un informe sobre la participación de España en la guerra de Irak

MADRID
SERVIMEDIA

La Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados rechazó este miércoles una proposición no de ley por la que se instaba al Gobierno a realizar y enviar a la Cámara Baja, en el plazo de nueve meses, un informe de evaluación sobre la participación militar, comercial y en el ámbito de la cooperación española en Irak.

La iniciativa, consensuada por ERC y el PSOE, contó con 18 votos a favor (ERC, PSOE, Unidos Podemos y Partit Demòcrata Catalá) y 18 votos en contra (PP, Ciudadanos y UPN). En caso de empate, según establece el reglamento del Congreso, la propuesta queda rechazada. La ausencia del PNV podría haber sido determinante para decantar la votación, en caso de haber decidido apoyar la propuesta.

La primera sesión de la Comisión de Asuntos Exteriores en esta legislatura dedicada al debate de proposiciones no de ley (que no vinculan legalmente pero tienen la fuerza de un mandato político) ha abordado los siguientes asuntos: actuaciones para afrontar la crisis humanitaria de los refugiados, el acuerdo de libre comercio entre UE y Canadá, Gibraltar, el impago de pensiones por parte del Gobierno venezolano a beneficiarios españoles y la solicitud de creación de una subcomisión para el estudio de las consecuencias del ‘Brexit’.

El texto rechazado surgió a partir de la propuesta de ERC para crear una “comisión de evaluación” de la participación de España en la guerra de Irak de 2003. Con esta pretensión, los independentistas catalanes pretendían constituir una versión a la española del ‘informe Chilcot’ encargado por Reino Unido y que concluyó que el principal argumento para iniciar aquella guerra era falso.

“SERVILISMO” DE AZNAR

Ante esta propuesta, el diputado socialista Ignacio Sánchez Amor presentó una enmienda al texto planteado por ERC que ha sido aceptada por los independentistas catalanes. En la misma, se establecía que “el Congreso de los Diputados insta al Gobierno a realizar y enviar a la Cámara Baja, en el plazo de nueve meses, un informe de evaluación sobre la participación militar, comercial y en el ámbito de la cooperación española en Irak. Dicho informe será remitido a la Comisión de Asuntos Exteriores y a los grupos parlamentarios, para la tramitación de las iniciativas que consideren oportunas”.

Joan Tardà, de ERC, reconoció que a pesar de que la enmienda socialistas “desvirtúa un tanto” lo que reclamaba su formación la aceptaban con la esperanza de que el informe que enviaba el Ejecutivo a la Cámara Baja no sfuese un “trabajo escolar” sino un texto riguroso y “homologable” a lo realizado en otros parlamentos.

A su vez, Sánchez Amor subrayó la importancia de aprobar la propuesta en el hecho de que la guerra de Irak fue “ilegal”, lo que llevó al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero a retirar las tropas españolas de este país en 2004 nada más llegar a La Moncloa.

Contrapuso esta actitud con la del expresidente del Gobierno José María Aznar quien, a su juicio, se entregó de manera “servil” a EEUU para conseguir la medalla del Congreso de este país.

“REVISIONISMO” DE LA HISTORIA

Al mismo tiempo, el diputado del Grupo Mixto Jordi Xuclà instó a aprovechar la nueva correlación de fuerzas parlamentarias en aras de la transparencia en la Cámara, mientras que Miguel Ángel Bustamante, de Unidos Podemos, consideró el actual un “momento adecuado” para llevar a cabo una investigación sobre la participación de España en la guerra de Irak, una contienda bélica que definió como “ilegal, ilegítima e imperialista”.

También llamó la atención sobre el hecho de que el ex primer ministro británico Tony Blair y el expresidente de EEUU George Bush han pedido perdón por apoyar la guerra, algo que todavía no ha hecho Aznar.

Por su parte, el diputado de Ciudadanos Miguel Gutiérrez rechazó la propuesta acusando a quienes la promueven de “reabrir conflictos ya olvidados”. Además, dijo que “si hubiese existido una responsabilidad política ya habría quedado resuelta en las elecciones de 2004”.

Por último, el diputado popular Ricardo Tardo destacó como “ilegal”, llena de “errores garrafales” y “engendro jurídico” la propuesta planteada y llamó la atención sobre el hecho de que la izquierda ideológica española tiene “la obsesión” de de “reescribir la Historia”, una tarea que dijo es competencia de los historiadores.

(SERVIMEDIA)
02 Nov 2016
MST/gja