El portavoz adjunto del PP en la capital, Íñigo Henríquez de Luna, aseguró que esta medida anunciada por el responsable municipal de Hacienda, Carlos Sánchez Mato, no aparece en las Líneas Fundamentales de los Presupuestos previstas por el Consistorio, al tiempo que recordó que ya fue anunciada por este edil el año pasado, cuando Manuela Carmena le hizo recular.

Miguel Ángel Redondo, concejal de Ciudadanos, advirtió por su parte de que ya “hay una gran presión fiscal para la mayor parte de los madrileños” y rechazó la iniciativa de la Junta de Gobierno local, que prevé establecer una tasa de entre 26 y 742 euros por cajero, dependiendo de su ubicación, por uso de la vía pública, como ocurre con las terrazas.

Para el popular, “la imposición de la nueva tasa podría perjudicar a los madrileños, ya que las entidades bancarias podrían optar por reducir la red de cajeros, empeorando el servicio, o repercutir la tasa en sus clientes”, mientras que Redondo alertó de que “el 70% de los madrileños pagará más impuestos” con las nuevas medidas fiscales.

IMPUESTO A COCHES DE GAMA ALTA

El Gobierno municipal también aprobó hoy elevar al máximo la cuota del Impuesto para Vehículos de Tracción Mecánica a los coches y motos de mayor potencia a partir de 2017, un acuerdo que no satisfizo a Ciudadanos, que considera que los propietarios de coches de alta gama los matricularán en ciudades aledañas.

En esta línea, Redondo reclama “una reducción del impuesto de circulación sobre las motocicletas”, una iniciativa que ya presentaron en varias ocasiones y que, lejos de ser aplicada, la nueva ordenanza grava al máximo a las motocicletas de más de 500 centímetros cúbicos.