El concejal de Economía y Hacienda, Carlos Sánchez Mato, explicó ante el Pleno municipal que, dado que el Ayuntamiento está cumpliendo con el pago de deuda y cerrará en superávit, debe aumentar el gasto para garantizar los servicios de los madrileños. Sin embargo, el Ministerio de Hacienda no permite una ruptura del techo de gasto de cerca de 700 millones de euros.

El Ayuntamiento de la capital pretende presentar unos presupuestos un 9,36% superiores a los de 2016, lo que, según las previsiones de la Junta de Gobierno, se traducirá en un incremento de 363 millones de euros.

El ministerio comandado por Cristóbal Montoro debe dar el visto bueno a este Plan Económico Financiero, algo que, por el momento, no hará puesto que obliga a destinar ese incremento del techo de gasto a pagar la deuda del Consistorio de manera anticipada, lo que Sánchez Mato considera una “aberración”.

El Grupo Municipal Socialista apoyó a Ahora Madrid en este asunto y aseguró que “Madrid tiene buena salud”, según expresó. Por tanto, no entiende que el Ayuntamiento “tenga que aplicar recortes” por culpa de una regla de gasto que fija el Estado, y es que “Madrid tiene superávit, el Estado no”.

Ciudadanos y PP se opusieron a los planes del Gobierno municipal para aumentar el gasto. El concejal popular Íñigo Henríquez de Luna aseguró que Ahora Madrid “ha venido a derribar el sistema”, mientras que el edil de Ciudadanos Bosco Labrado insistió en que el plan del Consistorio es “buscar una confrontación con Hacienda”.