Según los datos de Cicloplast, entidad sin ánimo de lucro que impulsa la industria para promover el reciclaje y la prevención de los plásticos, presentados este jueves en Madrid, el volumen de envases plásticos reciclados se ha multiplicado por siete desde 2000, primer año en que empezó a elaborar estadísticas.

En 2014, España ocupaba el segundo lugar en volumen de reciclaje de plásticos de Europa, solo por detrás de Alemania (13,6 kilogramos por habitante). Superaba entonces a países como Bélgica (7 kg/hab), Suiza (5,3 kg/hab) y Noruega (4,7 kg/hab), y duplicaba a Francia (4,1 kg/hab) y Suecia (3,9 kg/hab).

La directora general de Cicloplast, Teresa Martínez, explicó en rueda de prensa que la singularidad y ventaja del modelo español para la recogida selectiva de plásticos reside principalmente en que “el contenedor amarillo nos permite reciclar todo tipo de plásticos, tanto los envases rígidos como los flexibles”. Esto abarca desde la botella blanca de leche, la tarrina de yogur y el bote de gel a las bolsas, bandejas y filmes de plásticos. Francia y Bélgica, que tradicionalmente sólo reciclaban botellas, están cambiando hacia el modelo español, abriendo también su contenedor a los envases plásticos flexibles.

Por comunidades autónomas, País Vasco (12 kg/hab), Cataluña (11,5 kg/hab), Comunidad Valenciana (11,1 kg/hab), Andalucía (10,8 kg/hab) y Castilla-La Mancha (10.6 kg/hab) son las más concienciadas.

PREVISIONES

En la actualidad, España recicla el 42,5% de los envases plásticos que genera en los hogares, la industria y las actividades comerciales (más de la mitad de ellos corresponden al ámbito doméstico).

El Nuevo Paquete de Economía Circular propuesto por la Comisión Europea plantea alcanzar el 55% en 2025, mientras que el Parlamento pide llegar al 60%.

De acuerdo con las previsiones de Cicloplast, España podría lograr un 56% en este terreno, con lo que sí compliría la normativa actual pero no los objetivos más ambiciosos.

Si se considera el conjunto de todos los plásticos (envases, plásticos agrícolas, automóviles, etc.), el país presenta un nivel de reciclaje del 33%, que en 2020 podría ser del 42% y en 2025, del 49%.

“Esto indica que existen límites a la reciclabilidad”, explicó Martínez, determinados por factores como el origen y lugar de generación del residuo, el tamaño de la pieza, la existencia de mezclas con otros materiales, la presencia de filmes multicapa o de materiales impropios, su contaminación con sustancias no plásticas, etc. Sin embargo, prosiguió, “todavía hay margen de mejora y España puede y debe avanzar más en el reciclaje de plásticos”.

En este sentido, Martínez defendió la necesidad de sensibilizar y concienciar a la ciudadanía, invertir en I+D para reutilizar el plástico reciclado, mejorar la tecnología y las infraestructuras disponibles y fomentar la educación ambiental, algo que por ejemplo Cicloplast persigue con su guía ‘Los 50 Falsos Mitos y Realidades sobre los Plásticos’.