Lo dijo en declaraciones en Antena 3, recogidas por Servimedia, donde consideró que existen distintas causas por las que Podemos perdió más de un millón de votos en los comicios generales, como la “campaña del miedo” que ha llevado a cabo el PP contra ellos, la alianza electoral con Izquierda Unida u otros aspectos externos al partido.

No obstante, aseguró que el electorado que les votó el 20 de diciembre y que no lo hizo el 26 de junio “no se ha ido a otro partido”, sino que se quedó en casa y no ejerció su derecho a voto.

“Si algo hemos aprendido es que hemos de ser cautelosos con las encuestas”, dijo Bescansa, quien reconoció que pecó de un exceso de confianza en las encuestas, como la del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) que confirmaba el 'sorpasso' en votos y en escaños al PSOE, en lugar de analizar el entorno social y político con una encuesta propia. “En esta campaña no hicimos encuesta propia”, lo que es un “error gravísimo”, admitió.

“Hice una interpretación y antepuse un criterio de economía al de confiabilidad”, agregó al referirse a lo costoso que resulta realizar una encuesta. Sin embargo, aseguró que ahora toca utilizar “herramientas cualitativas y cuantitativas” y establecer “mucho diálogo” entre el partido y las bases para obtener las conclusiones pertinentes.

A partir de ahí, dijo, se tomarán “las decisiones que se correspondan”. “Es pernicioso que se articule un discurso para ver quién ha tenido la culpa”, afirmó después de que en los últimos días hayan aflorado las especulaciones sobre una guerra interna en Podemos tras el fiasco electoral.

Tras descartar unas terceras elecciones, aseguró que el PP ha de demostrar ahora si es capaz de conformar una mayoría. “La pelota está en el tejado del PP y eso hay que respetarlo”, manifestó, para preguntarse después cómo es posible que un “partido corrupto” haya podido mejorar resultados en estas elecciones.

Sobre la reunión de hoy entre Podemos, Izquierda Unida y las confluencias, Bescansa dijo que tendrá lugar a primera hora de esta tarde en la sede del partido morado, en la madrileña calle de Princesa.