Venezuela. PP y PSOE pactan un texto de apoyo a los opositores presos en Venezuela

MADRID
SERVIMEDIA

PP y PSOE acordaron este miércoles en el Congreso de los Diputados el texto de una resolución de apoyo a los opositores presos en Venezuela que fue respaldada también por Ciudadanos, por Democràcia i Llibertat y por el PNV y que contó con la abstención de Podemos.

El texto acordado se había concretado en una enmienda transaccional a la proposición no de ley defendida por el PP, pero ese tipo de enmiendas requieren la unanimidad de la Cámara para poder ser sometidas a votación y en el último momento el portavoz de ERC, Joan Tardà, reclamó que la proposición no de ley se votara en los términos en los que fue presentada, por lo que impidió la votación de la enmienda transaccional.

El portavoz del PP, Fernando Martínez-Maíllo, rechazó ese “truco parlamentario” y sometió a votación la proposición de su grupo con la enmienda de adicción del PSOE. Finalmente obtuvo 250 votos a favor, 12 en contra y 65 abstenciones.

En su intervención, Martínez-Maíllo alertó de que la lucha por la libertad y la democracia está por encima de siglas y los derechos humanos no entienden de fronteras ni de ideologías. El delito de esos presos, dijo, fue manifestarse en favor de las libertades y los derechos fundamentales de sus conciudadanos.

Aseguró que el juicio a Leopoldo López fue “una farsa” y contra él se esgrimieron “pruebas falsas”, como ha denunciado el fiscal que huyó a Estados Unidos “sometido a presiones” del régimen venezolano. “No puede dudarse por parte de nadie” sobre la ausencia de democracia en ese país, sentenció.

Denunció que el chavismo, “como todos los populismos”, aprovecha los momentos de crisis para mediante los cauces democráticos llegar al poder y una vez en el poder “acabar con los pilares del Estado de Derecho”, por lo que el populismo “es condenable”. “Se comienza señalando a un periodista y se termina cerrando medios de comunicación”, alertó, mirando a los escaños de Podemos.

Aprovechó, además, para dejar claro que en España “no hay presos políticos, los terroristas no son refugiados y Otegi no es un hombre de paz”. “No caben medias tintas”, alertó. “O se está favor de la libertad o se está en contra”.

En nombre del PSOE, Antonio Gutiérrez Limones respaldó el acuerdo alcanzado alertando sobre la necesidad de “encontrar mediadores”, porque llegará el momento de la negociación entre las partes y desde España “deberíamos haber hecho algo además de denunciar lo obvio”.

"INFORMES FALSOS"

Por Podemos, que había presentado enmiendas finalmente rechazadas, Pablo Bustinduy abogó por la resolución pacífica de conflictos en la que España “podría y debería jugar un papel clave”, pero denunció que la pretensión del PP es emprender una “operación político-mediática” para que Venezuela sea el arma con el que “desautorizar y desacreditar” a su formación, utilizando incluso mecanismos del Estado y “fabricando informes falsos”. En un país serio, dijo, el ministro del Interior habría dimitido.

Su intervención se vio interrumpida por los gritos de una persona del público, donde había representantes de la oposición venezolana y donde llegó poco después el padre de Leopoldo López. Si el compromiso del PP fuera realmente con los derechos humanos, aseguró, se hablaría de presos palestinos en cárceles de Israel, de saharauis en Marruecos, de retenidos en Guantánamo, de los acuerdos con el Partido Comunista chino o de la venta de material antidisturbios al propio Gobierno de Venezuela.

También desde ERC Ana Surra defendió enmiendas y criticó la “obsesión” del PP con ese país pero no con otros que tienen su misma ideología neoliberal, y pidió a los dirigentes de ese partido que dejen de intentar pacificar otros estados y se centren en abrir una negociación con Euskal Herria.

Sin enmiendas y con in firme apoyo al texto acordado, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, alertó de que las urnas no bastan para tener democracia porque los nazis ganaron elecciones. “En Venezuela no hay democracia, porque aunque haya urnas no se respetan los derechos humanos”, sentenció.

Subrayó dirigiéndose a Leopoldo López que España es un país tan democrático que quienes han justificado el terrorismo pueden tener grupo parlamentario, y juzgó “vergonzosos” algunos aplausos durante la sesión. El único botón “hábil para los demócratas”, dijo, es el verde, porque el rojo o el amarillo es lo que votarían Nicolás Maduro o Hugo Chávez, “referente ideológico de algunos”.

En nombre de DiL, Jordi Xuclà pidió que la política exterior no sea arma arrojadiza para el “desgaste político interno”, algo que consideró “lamentable, patético”, el “broche de chatarra típico de una legislatura fallida” caracterizada por un “festival de egos”.

En esa misma línea, el portavoz del PNV, Aitor Esteban, denunció el uso de ese asunto en política interna y recordó que también en España se han cerrado periódicos mediante decisiones judiciales que después han sido revocadas sin que haya habido reparación alguna.

(SERVIMEDIA)
27 Abr 2016
CLC/gja