El ministro aseguró que, "en general", en España "no ha habido problemas sobre las lenguas", ya que "hemos convivido estupendamente bien y logrado tener una serenidad en los ciudadanos en su aprendizaje".

De este modo, subrayó que "nos han ido bien las cosas y espero que siga ocurriendo lo mismo y no se adopte ninguna medida que ponga en cuestión eso".

Sin embargo, el titular de Educación matizó que cada comunidad puede "adoptar las decisiones que desee dentro de su autogobierno, pero debe hacerlo para garantizar esa convivencia" y recalcó que "Europa mira con admiración a nuestro país, encuentra una ventaja extrordinaria el bilingüismo de algunas comunidades, no se como a veces nosotros lo convertimos en un problema".

Asimismo, Gabilondo aseguró que "ninguna lengua se puede usar como arma arrojadiza contra otras, son espacios de convivencia" y apeló a que las decisiones que se tomen al respecto tengan en cuenta la "viabilidad de una organización razonable" de los centros educativos, de "enorme complejidad". Con todo, matizó que "respeto el Gobierno de Galicia y su capacidad para adoptar decisiones".