El consejero de Políticas Sociales y Familia de la Comunidad, Carlos Izquierdo, visitó hoy el Centro de Atención Temprana y el Centro Ocupacional que gestiona la Asociación de Padres y Amigos de Niños con Discapacidad de Rivas Vaciamadrid (Aspadir), donde la Comunidad de Madrid ha aumentado casi un 47% el número de plazas de atención temprana para los más pequeños.

Izquierdo destacó en su visita “el fantástico grado de atención, los talleres y la satisfacción” que pudo ver en los usuarios de Aspadir. Según el consejero regional, Madrid está trabajando en “la estrategia más ambiciosa de España” para ayudar a las personas con discapacidad.

“Una estrategia con un objetivo fundamental, que es la integración y la inclusión de las personas con discapacidad para que puedan a acceder a una vida mucho más autónoma”, destacó el mandatario autonómico. “El futuro es trabajar cuanto antes la atención temprana”.

CENTRO DE RIVAS

Acompañado del alcalde de Rivas Vaciamadrid, Pedro del Cura, y de la concejala de Infancia y Juventud, Aída Castillejo, Izquierdo recorrió los centros que componen Aspadir con Dani y Carmen, usuarios de la asociación, que hicieron de cicerones durante la visita.

El consejero conoció el Taller de Habilidades Sociales, donde los usuarios estaban trabajando en las 'Historias de vida', un proyecto en el que hablaban de las cosas que más les gustaban y de las cosas que menos les gustaban. Cuando la actividad apenas había empezado, solo había cosas en el cuadro de “lo que me gusta”, tres en concreto: piña, cerveza y lentejas.

La visita también pasó por el Taller Prelaboral, el que menos tiempo lleva en el centro, donde se trabaja con piezas de madera para hacer escalones o robots “estilo retro”, entre otras cosas, y por el Taller de Artesanía, en el que se fabrican cuadernos hechos a mano que María, otra usuaria de Aspadir, regaló a Izquierdo, Del Cura y Castillejo.

La ruta terminó en el huerto, del que se ocupan los propios usuarios y que sirve incluso para el autoconsumo de las personas que trabajan en el centro. Dani, el anfitrión de la visita, destacó los tomates por encima de todo. “Están buenísimos”, apuntó.