Así, el texto aboga por reducir la desigualdad educativa que afecta a la infancia gitana, marcando como objetivo reducir a la mitad la tasa actual de abandono escolar que se produce antes de la finalización de la etapa obligatoria (de 63,7% a 32%).

Igualmente y ya en el plano habitacional, la FSG apuesta por erradicar el chabolismo y la segregación residencial a través de planes de acceso a una vivienda digna que contemplen medidas de acompañamiento social.

Es partidaria también esta organización de incrementar el porcentaje de población gitana asalariada hasta un 50% y de garantizar el acceso de la juventud gitana a los recursos disponibles para la promoción del Empleo Joven (Garantía Juvenil y otros).

Finalmente, recomienda a los partidos que promuevan la igualdad y la lucha contra la discriminación, reactivando el Consejo para la Eliminación de la Discriminación Racial o Étnica, y con la aprobación definitiva de una Ley Integral para la Igualdad de Trato y No Discriminación.