Así se lo han trasladado estas organizaciones, entre ellas Visual Entidad de Gestión de Artistas Plásticos (Vegap), la Asociación General de Autores y Editores (SGAE), la Asociación Colegial de Escritores de España (ACEE), el Centro Español de Derechos Reprográficos (Cedro) y la Plataforma en Defensa de la Cultura, a los ministros de Educación, Iñigo Méndez de Vigo, y de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez.

Explican que desde el año 2012 aquellos profesionales de la creación mayores de 65 años que deseen continuar con su actividad se encuentran en una encrucijada si la retribución por su obra supera el Salario Mínimo Interprofesional anual bruto (9.000 euros en 14 pagas aproximadamente), ya que deben renunciar a la retribución por sus cursos, artículos, conferencias y a los derechos de autor que su obra genere o a su pensión contributiva y no contributiva con carácter retroactivo.

Es decir, si un artista crea una obra a los 72 años y decide cobrar las ganancias que genere, deberá devolver los 7 años de pensión recibidos, según afirman.

Para estas organizaciones, esta situación provoca un daño de proporciones incalculables al desarrollo intelectual del país. En esta línea, el humorista gráfico Forges declaró hoy que espera que haya "un poco de respeto a la cultura y se deje de acosar, destrozar, arruinar y arrasar todo aquello que tenga que ver con la inteligencia”.

Tanto Forges como el presidente de la Asociación Colegial de Escritores, Manuel Rico, indicaron que esta situación no se da en ningún otro país europeo. Además, calificaron como injusticia que un jubilado sí pueda recibir beneficios de sus acciones en bolsa o del arrendamiento de pisos mientras que ellos se ven obligados a renunciar a su pensión.