De los 1.200 presidentes de empresas entrevistados en 14 países de Europa occidental para la realización del estudio, el 86% consideraba los problemas ecológicos y sociales como motivación, para el desarrollo de modelos de negocio innovadores.

El estudio ofrece ejemplos de empresas que han desarrollado métodos innovadores para afrontar los principales problemas sociales y medioambientales.

Entre ellos los de las multinacionales Procter & Gamble y Henkel, que han creado nuevos productos y servicios con el fin de reducir su impacto medioambiental, o el del fabricante de mobiliario de oficina Herman Miller, que utiliza materiales que pueden reciclarse repetidamente.

También destaca el programa de microcréditos de Deutsche Bank y el servicio de banca telefónica para móviles de Vodafone, como ejemplos de políticas que facilitan el acceso a productos y servicios a los más desfavorecidos, cubriendo así necesidades sociales acuciantes.

Sin embargo, la mayoría de las empresas estudiadas se limitan a adoptar medidas para hacer más sostenibles sus cadenas de suministro, logística y políticas de subcontratación, pero aún no fomentan hábitos de consumo responsable, a pesar de que conocen los beneficios que esto podría tener para sus negocios.