Por cada euro que los profesionales de la compañía, especializada en la atención de las personas dependientes, han aportado a través de su nómina, la Fundación SAR ha donado otro para ayudar a las víctimas del terremoto.

Los fondos recaudados se destinarán a suministrar agua potable, alimentos, medicinas y refugios temporales a los habitantes de las poblaciones de Jacmel y Puerto Príncipe. Además, Unicef también está ayudando en estos momentos a los niños que han sido separados de su familia a causa del terremoto.