Según explicó en una rueda de prensa Thomas Bergmark, director mundial de sostenibilidad, “se trata de sensibilizar a los consumidores e involucrarles en pequeños cambios, de forma que los hogares también sean sostenibles”.

Con este proceso de cambio, que se realiza bajo el lema “Una lista sin fin”, la multinacional sueca quiere ayudar a reducir el impacto medioambiental en los hogares de sus clientes en un 50% en 2015.

Así, quien compre por ejemplo una mesa Lack, sabrá que está fabricada con relleno de papel reciclado en forma de panel de abeja, por lo que usa menos materia prima que un tablero de partículas y consecuentemente conlleva una menor emisión de CO2.

Además, se esta procediendo a la revisión de diversos procedimientos, como la mejora en la logística, que conllevará que en el plazo máximo de tres años se sustituya los palés de madera por otros de cartón reciclable, y un incremento de las entregas directas de proveedores en las tiendas, que pasará del 39% actual en España al 55% en 2015.

Por otra parte, Peter Betzel, director general de Ikea Ibérica, y Cristina Humet, directora de comunicación, también presentaron los objetivos que se han fijado para 2015, como la reducción de un 25% del consumo de agua respecto a 2005 o el reciclaje del 100% de los residuos generados.

Además, resaltaron su compromiso en poder pasar del 2% de integración laboral de personas con discapacidad al 4%, dentro del programa “I love integra”, iniciativa que permitirá incrementar el porcentaje de mujeres en puestos directivos hasta el 60%.