La manifestación, que se inició al mediodía y discurrió por la calle de Alcalá, había sido convocada por 40 colectivos provida, entre los que estaban el Foro de la Familia o la Federación Española de Asociaciones Provida.

A la protesta acudieron algunos representantes del PP, como su presidenta en Madrid y candidata a la Alcaldía de la capital, Esperanza Aguirre; el exministro Jaime Mayor Preja; el alcalde de Alcorcón, David Pérez; y diputados y senadores que han cuestionado que la reforma del aborto se quede en que las menores deban pedir permiso a sus padres para interrumpir un embarazo.

La marcha se inició con una "cuenta atrás para que termine el aborto en España" y partió desde la zona entre la calle Sevilla y calle Alcalá hacia la Plaza de la Independencia. Los asistentes expresaron su malestar con la reforma de la ley del aborto propuesta por el Gobierno, que se limitará al permiso paterno para las menores que no quieran ser madres.

"TOTALMENTE DECEPCIONADOS"

Este sentir lo expresó el presidente del Foro de la Familia, Benigno Blanco, al reconocer que se sienten "totalmente decepcionados" y, posteriormente, decir que “al decidir el voto debemos pensar si los candidatos hablan en favor o en contra de la vida. Nuestro voto es importante".

Y la presidenta de Concapa, Begoña Ladrón de Guevara, que reprochó al Gobierno no haber defendido la vida "como creíamos que la iban a defender” y sostuvo que amparar al no nacido es algo que debería hacerse “independientemente de partidos políticos e ideologías”.

Entre banderas de España y autonómicas como Cataluña, Andalucía o Asturias, así como alguna enseña del Vaticano, la marcha transcurrió en un ambiente festivo. Carritos con bebés, mujeres embarazas, familias enteras, mayores y jóvenes, ocuparon la totalidad de la calle Alcalá entre la cabecera de la marcha (Sevilla) y el escenario final que se situó en la Puerta de Alcalá.

Con banderolas de ‘Cada vida importa’ -que costaban 3 euros- o camisetas con el lema de la marcha – a 2.50 euros- los presentes gritaban “vida sí, aborto no”. Lo recaudado, aseguraron, era para la red de ayuda a las mujeres embarazadas con problemas económicos y por eso también había voluntarios que pedían con huchas.

“El aborto no es un derecho, es una aberración” también es otro de los carteles que había en la manifestación. Alicia Latorre, presidenta de la Federación Española de Asociaciones Provida, pidió el fin del "holocausto silencioso y consentido" que considera es el aborto; porque "queremos unas leyes que protejan siempre y en toda circunstancia a todo ser humano", afirmó Latorre, quien añadió que "debe terminar ya este holocausto silencioso y consentido".

BAÑO DE MASAS DE AGUIRRE

Por su parte, Aguirre se dio este sábado un baño de masas al acudir a la protesta. La candidata a la Alcaldía fue requerida para saludos y fotos por numerosos jóvenes y mayores, pero no portó ningún cartel ni vitoreó ninguna de las consignas de los manifestantes. Tampoco se situó en la cabecera de la marcha.

En esta reivindicación de la vida también Mayor Oreja, quien aseguró a Servimedia que Mariano Rajoy cometió "la peor de las decisiones" al no modificar a fondo la ley del aborto que impulsó su predecesor en el Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Para el exministro del Interior, “esa mala decisión" del Ejecutivo de Rajoy “supone sumarse a una moda dominante en Europa, que consiste en no reconocer la dignidad de las personas. Eso es ir en la mala dirección, por eso estamos aquí"

También estuvo en la marcha, el alcalde Alcorcón, David Pérez, quien afirmó en Twitter que había ido a la marcha a defender “a los niños y niñas no nacidos", ya que "están absolutamente desprotegidos por leyes sectarias e inhumanas”.