Ébola. Rajoy asegura que el problema “está encauzado”

- Sánchez le acusa de presidir “un auténtico desgobierno”

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró este miércoles que “el problema” generado por la llegada del ébola a España “está encauzado”, ya que la única persona que puede contagiarlo es Teresa Romero “y esperemos que pronto ya no pueda hacerlo nadie”.

Rajoy respondió en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados a una pregunta del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, sobre la valoración que hace de su propia actuación en esta crisis de salud pública.

El presidente recordó que ya habló sobre ello el miércoles pasado, apenas 48 horas después de conocer “la dura noticia” del contagio de la auxiliar de enfermería, y esbozó las decisiones tomadas hasta ese momento y las prioridades.

En ese momento, recordó, se había creado la comisión de coordinación entre el Gobierno y la Comunidad de Madrid y se habían regulado los contactos con la OMS, la Unión Europea, los organismos internacionales y clínicas de Estados Unidos.

Las prioridades eran, añadió, primero la recuperación de Teresa Romero, y después hacer un seguimiento de las personas que habían tenido contacto con ella y con el misionero Miguel García Viejo, garantizar el apoyo “absoluto” a los profesionales que deben hacer una labor “muy difícil”, informar a la opinión pública e investigar lo sucedido.

El viernes siguiente “elevamos el nivel de la comisión” para incluir a los ministerios y a los profesionales del Carlos III y se creó un comité científico. Aseguró que se han cumplido las prioridades y reiteró lo que dicen los expertos, que el contagio es “muy difícil” porque solo es posible por contacto directo con fluidos de personas enfermas en fase avanzada.

Solo Teresa Romero puede en este momento contagiar el virus, sentenció, “y esperemos que pronto ya no pueda hacerlo nadie”.

Pedro Sánchez denunció que los profesionales sanitarios hablan de “desvergüenza” de unos políticos que tratan de “responsabilizar de sus propias irresponsabilidades” a Teresa Romero, y le advirtió de que gobernar “no es únicamente hacerse una foto” en la entrada del Carlos III, sino escuchar a los expertos que han criticado su gestión.

Subrayó que ya en agosto, cuando el primer misionero fue repatriado, los socialistas pidieron la comparecencia de la ministra de Sanidad, Ana Mato, pero el PP la rechazó, y cuando ella por fin informó a los ciudadanos, después del contagio de Teresa Romero, “toda España se dio cuenta del auténtico desastre que es su Gobierno”.

En ese Gobierno, argumentó, hay una vicepresidenta que se encarga de la Sanidad y una ministra del ramo que no se ocupa “de nada, afortunadamente”, pero a la que el presidente “apoya”, y un presidente “que ni está ni se le espera”.

Le reprochó haber dejado “con la boca abierta” a los ciudadanos al haber dicho que los colegas europeos están “encantados” con la gestión de esta crisis en España, y que no haya reprobado las “viles” palabras del consejero madrileño Javier Rodríguez.

“Una y mil veces” le reclamará explicaciones sobre lo ocurrido, sentenció, con independencia de la “mayoría absolutísima” del PP. “Es usted el presidente de un desgobierno”, le dijo.

Rajoy aseguró que es el líder socialista quien deja a los españoles “con la boca abierta”, por ejemplo al sugerir la supresión del Ministerio de Defensa, al “perseguir” a Miguel Arias Cañete y “fracasar” porque finalmente será comisario, o al incumplir el acuerdo para que Jean Claude Juncker sea presidente de la Comisión Europea. “De fotos y ocurrencias no le voy a decir nada”, ironizó el presidente.

Le emplazó a aportar cualquier idea que tenga “para resolver el problema” y aseguró que a día de hoy “está encauzado”, aunque hay que seguir “trabajando, perseverando” y apoyando a unos profesionales que están “trabajando bien”.

(SERVIMEDIA)
15 Oct 2014
CLC/caa