Ébola. La auxiliar fue presionada con fiebre alta cuando sugirió que pudo tocarse la cara con los guantes, afirma CSI-F

- El sindicato considera “muy osado y muy atrevido” que dos consejeros madrileños la culpen del contagio

MADRID
SERVIMEDIA

La auxiliar de enfermería Teresa Romero, que está infectada de ébola, fue presionada mientras tenía fiebre alta en un interrogatorio en el Hospital Carlos III de Madrid para esclarecer las causas del contagio de la enfermedad, en el cual sugirió pero no afirmó que pudo haberse infectado al tocarse la cara sin haberse quitado los guantes mientras atendía al misionero Manuel García Viejo, según CSI-F.

Así lo aseguraron esta tarde en una rueda de prensa en Madrid la portavoz de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F), Elena Moral, y una de las delegadas de este sindicato en el Hospital Carlos III, África Díaz.

Moral señaló que Romero no se encontraba en el mejor estado físico cuando fue interrogada “media hora antes” de que el doctor Germán Ramírez comentara en una comparecencia ante los medios de comunicación que Romero pudo haberse contagiado tocándose la cara sin quitarse los guantes de protección.

Subrayó que Romero fue preguntada “con una fiebre considerable y estando malita”. “Poco antes de una rueda de prensa se entra en la habitación para preguntarle punto por punto qué es lo que ha pasado. En su primera declaración dijo que había cumplido el protocolo paso a paso”, indicó, antes de añadir que fue “presionada para que algunos oigan lo que quieren oír”.

Por ello, consideró “muy atrevido y muy osado” que los consejeros de Sanidad y de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Javier Rodríguez y Salvador Victoria, respectivamente, culpen a la auxiliar de enfermería de haberse contagiado al no respetar el protocolo, cuando no se ha iniciado una investigación rigurosa de los hechos, lo que ha exigido el CSI-F ante la Inspección de Trabajo.

“Exigimos una rectificación urgente e inmediata. No podemos consentir, y ya van dos, que se culpe, se responsabilice, se estigmatice y se señale a Teresa como responsable de lo que está sucediendo. La culpa no es suya, sino de los medios. Ella se limitó a seguir rigurosamente el protocolo establecido. Está recibiendo un tratamiento indecente del caso y juicios de valor sin que haya concluido una investigación seria sobre lo sucedido”, apostilló.

COMITÉ DE ALERTA

Por su parte, Díaz comentó que Germán Ramírez, doctor de Medicina Interna del Hospital Carlos III que dejó caer el posible error humano de Romero, “no estaba autorizado” para hacer declaraciones a la prensa y que desde el centro hospitalario “van a tomar algún tipo de medida al respecto” a través de un comité de alerta creado en el Hospital de La Paz.

Díaz apuntó que Romero “nunca dijo al 100% que se tocó la cara con los guantes, dijo que pudo ser”, e indicó que “no estaba en las mejores condiciones”, con lo que puso estas declaraciones “en cuarentena”.

Por otro lado, Díaz aseguró que han aumentado las bajas laborales de celadores, auxiliares y enfermeras y que los profesionales del hospital van a recibir “formación y entrenamiento” gracias a las reclamaciones sindicales, además de que las esclusas donde los sanitarios se quitan los trajes aislantes contarán próximamente con cámaras.

Por último, Manuel Torres, también delegado del CSI-F en el Hospital Carlos III, que trabajó con Romero atendiendo al primer paciente con ébola que llegó a España, el misionero Miguel Pajares, y que actualmente atiende a la propia auxiliar de enfermería, afirmó que, “a nivel colectivo, todos los que estamos trabajando con este tipo de pacientes estamos recibiendo ayuda psicológica”.

Torres puso el foco en la falta de formación que han recibido los sanitarios para atender casos de pacientes con ébola como causa del contagio de Romero. “¿Están preparados? ¿Les han dado cursos? ¿Formación?”, se preguntó.

(SERVIMEDIA)
09 Oct 2014
MGR/caa