Un total de 256 familias en situación de exclusión social de la Región de Cusco, agrupadas en la asociación ‘La Tierra de los Yachaqs’, participan en un proyecto de Fundación Codespa que tiene por objetivo que las 8 comunidades indígenas a las que pertenecen se beneficien económicamente de la actividad turística, en este caso del turismo de convenciones y eventos, al mismo tiempo que revalorizan su patrimonio cultural.

En esta zona, donde el turismo ha experimentado un importante crecimiento en los últimos años, se encuentra el famoso Valle Sagrado de los Incas, que atrae a miles de visitantes cada día. Es aquí donde Codespa ve la oportunidad de introducir a las poblaciones más desfavorecidas en el creciente sector turístico peruano y que, de esta forma, mejoren sus ingresos y sus condiciones de vida, mediante la revitalización de la cultura y su profesionalización dentro de esta importante actividad económica.

Estas comunidades desarrollan un modelo turístico basado en la calidad de sus servicios y en el valor cultural de sus productos, que se pretende introducir como un valor añadido a eventos y congresos empresariales a través de los productos y experiencias que ofrecen los nativos de la zona andina, entre ellas “presentaciones de música nativa con tambores, quenas, charangos, guitarra y arpa”, explica Pilar Montesinos, líder de una de las comunidades; representaciones de ritos ancestrales, como el pago de la tierra, y artesanías como cerámicas, bufandas y corbatas elaboradas en alpaca bebé.

MECANISMO PARA LA LUCHA CONTRA LA POBREZA

El turismo ya se ha reconocido como un mecanismo esencial en la lucha contra la pobreza y para el desarrollo sostenible en Cusco, por su capacidad de crear riqueza económica y social de forma más rápida que otros sectores, y mejorar la calidad de vida, a través de la generación de empleo. Esta actividad ya genera el 27% del PIB en esa región, más que el sector agrario, que supone el 25%.

En torno al 6% del los turistas que visitaron Cusco en 2011 lo hicieron por eventos y convenciones, un segmento en constante aumento y que demanda productos de tipo cultural como recorridos de comunidades nativas (10 %), manifestaciones artísticas musicales y teatrales (47 %), demostraciones artesanales y degustaciones gastronómicas típicas (32%). Estos servicios son prestados en parte por las comunidades nativas de la zona, transmisoras y conservadoras de ese patrimonio cultural, pero aún tienen brechas de competitividad.

Por eso, el proyecto de Fundación Codespa tiene como objetivo conseguir que decenas de familias andinas se beneficien de la comercialización de sus productos y servicios culturales nativos y que, su vez, las empresas dedicadas al sector turístico utilicen estos instrumentos para promover las tradiciones culturales de Perú. A través de esta iniciativa, se pretende extender el turismo rural comunitario como herramienta de crecimiento sostenible e incluyente en las poblaciones más desfavorecidas. El propósito final es fortalecer a la asociación ‘La Tierra de los Yachaqs’ para que puedan seguir ejecutando el proyecto sin la necesidad de la presencia constante de Codespa.

Fundación Codespa es una organización no lucrativa con 29 años de experiencia en cooperación internacional al desarrollo, que basa su actividad en dotar a las personas de oportunidades para que puedan ser protagonistas de su propio desarrollo a través del trabajo. También promueve el voluntariado corporativo entre los trabajadores de diversas empresas. En estas tres décadas esta entidad has gestionado un millar de proyectos en América Latina, Oriente Medio, África y Asia, que han permitido a millones de personas mejorar sus condiciones de vida.