La efectividad de estas pantallas será analizada por miembros del Grupo de Investigación en Ecología y Gestión de Ecosistemas Terrestre, del Departamento de Ecología de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), según informó este lunes esta institución educativa.

Este proyecto de investigación, denominado Life Impacto Cero, está financiado por la Comisión Europea y busca proteger la avifauna con pantallas anticolisión en líneas ferroviarias de alta velocidad.

Los investigadores de este proyecto evaluarán la efectividad de una nueva medida correctora basada en el concepto de "pantalla de tubos exentos", diseñada para desviar el vuelo de las aves por encima del área de riesgo, para lo cual deberán realizar diversos estudios de las aves en el entorno de la infraestructura, que permitirán conocer la mortalidad de aves por atropello y su reducción con la medida correctora.

Además, los investigadores pretenden obtener información detallada sobre cuáles son las especies más afectadas por los trenes y cuáles son los parámetros de las aves y del hábitat más determinantes del atropello. Con ello, generarán modelos predictivos para optimizar ambientalmente el diseño de las infraestructuras y la ubicación de las pantallas anticolisión.

Life Impacto Cero es un proyecto cofinanciado por el programa LIFE+, que subvenciona proyectos enfocados al logro de los objetivos y metas de la UE en materia de medio ambiente y conservación de la naturaleza.

Además de la UAM, participan varias empresas españolas: Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), Renfe, FCC Construcción S.A. y Prointec.

FASES DEL PROYECTO

Como primera fase del proyecto Life Impacto Cero, los investigadores de la UAM han seleccionado las áreas de trabajo con el fin de disponer de una área de ferrocarril en funcionamiento actualmente sin pantallas de protección y otra en el que se ha previsto la construcción de pantallas de diseño tradicional.

En esas áreas se inició este verano el análisis de las poblaciones de aves, sus patrones de uso del entorno de la vía y el comportamiento de vuelo, así como la mortalidad por atropello en el tramo que se encuentra actualmente en explotación.

Los muestreos se realizan tanto por procedimientos observacionales tradicionales como a través de filmaciones con cámaras de alta definición ubicadas en la vía y en la cabina de los trenes, y se repetirán estacionalmente hasta disponer de un ciclo anual de datos.

Con esta información, en una segunda fase, los investigadores decidirán la mejor ubicación para la pantalla experimental. En ese punto se construirá el prototipo experimental, de 400 metros de longitud y cinco metros de altura. Tras la instalación de la pantalla, se repetirá el protocolo de seguimiento de aves durante un año completo, atendiendo al lugar en que se han instalado las pantallas y las áreas control sin ellas.

Al final del proyecto se dispondrá de datos de mortalidad de aves antes y después de la construcción de la pantalla, así como del comportamiento de vuelo de las aves en vías con y sin pantallas de protección, y con dos tipos de éstas (la tradicional y el prototipo ensayado).

Con esta información será posible valorar la efectividad del prototipo, así como categorizar las especies de aves en función de su comportamiento respecto de la infraestructura ferroviaria y su riesgo de atropello. Así se prevé mejorar el diseño y la evaluación ambiental de proyectos que se vayan a construir en un futuro en zonas sensibles para las aves.