Así lo aseguró Ramos en su comparecencia ante la Comisión de Medio Ambiente y Cambio Climático del Senado para informar, entre otros asuntos, sobre las medidas puestas en marcha por el Gobierno para reparar los daños sufridos en la costa y en los ríos tras los temporales del pasado invierno.

Ramos explicó que los fuertes vientos y las lluvias persistentes provocaron “graves daños” en el litoral noroccidental, que afectaron fundamentalmente a playas, paseos marítimos, carreteras, puertos, puentes y diversas infraestructuras municipales de todas las comunidades autónomas de la cornisa cantábrica y la fachada atlántica gallega, aunque también se vio afectado el dominio público hidráulico de diversas zonas de Galicia y de Castilla y León.

Subrayó que, a partir de los datos recogidos y de los contactos mantenidos con las distintas administraciones (ayuntamientos y comunidades autónomas), se planificaron “de forma rápida y efectiva las actuaciones más urgentes para reparar y prevenir nuevos daños de futuros fenómenos”.

Añadió que el Gobierno aprobó el pasado mes de febrero un real decreto ley con una serie de medidas, inversiones, subvenciones, beneficios fiscales y otras ayudas para reparar los daños, favorecer el restablecimiento de los servicios y de la calidad de vida y el bienestar de las zonas afectadas.

DEVOLVER LA NORMALIDAD

Ramos indicó que una parte muy importante de las medidas puestas en marcha tras la aprobación del real decreto ley se corresponden con inversiones en obras de emergencia, que ejecuta el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

“Se trata de actuaciones que buscan la restauración de las zonas afectadas y asegurar la integridad y adecuada conservación del dominio público hidráulico y marítimo-terrestre”, destacó.

En concreto, según detalló, Medio Ambiente destinó 34,9 millones de euros al llamado Plan Litoral, que incluye todas las actuaciones de reparación en la costa, de competencia estatal, para restaurar las infraestructuras dañadas, paseos marítimos, accesos a playas, reposición de arena y trabajos para asegurar la sostenibilidad de la costa y proteger y mitigar futuros efectos de temporales.

Además, dedicó más de ocho millones de euros a reparaciones en materia de aguas entre las que se encuentran distintas actuaciones para restaurar y reparar desperfectos en infraestructuras existentes, así como otras para la limpieza de cauces que prevengan futuras avenidas.

“Gracias a esta rápida reacción, la práctica totalidad de actuaciones de reparación se encuentran en ejecución, muchas ya terminadas, y nuestra playas y el resto del litoral afectado estará listo para la temporada de verano”, señaló.