Siria cumple tres años de violencia con su sistema sanitario colapsado

- Save the Children denuncia que las vidas de millones de niños están en peligro

MADRID
SERVIMEDIA

La oleada de violencia en Siria cumplirá el próximo sábado su tercer aniversario, después de que el 15 de marzo de 2011 se generalizaran las protestas ciudadanas por la llamada ‘Primavera Árabe’, que el Gobierno comenzó a reprimir con detenciones y cargas policiales, y operaciones militares después. Transcurridos tres años, las vidas de millones de niños están en peligro porque el sistema sanitario está colapsado, según denunció este lunes Save the Children en un informe.

El trabajo de Save the Children, titulado ‘Un precio demasiado alto: el impacto de tres años de guerra en la salud de los niños y niñas sirios’, afirma que el sistema de salud de este país está “destrozado” y los menores “no sólo mueren por culpa de la violencia, sino a causa de enfermedades que previamente podrían haber sido prevenidas o tratadas”.

Así, subraya que más del 60% de los hospitales no funcionan, casi la mitad de los médicos sirios han huido, la ciudad de Alepo cuenta con apenas 36 galenos cuando debería contar con unos 2.500, el 93% de las ambulancias han sido dañadas, robadas o destruidas, y muchos trabajadores sanitarios han sido asesinados o encarcelados, o han escapado a otro país.

“El sistema de salud de Siria, completamente destruido, está forzando a los trabajadores sanitarios a emplear prácticas brutales. Además, una serie de epidemias han dejado a millones de niños y niñas expuestos a multitud de enfermedades mortales”, señala el informe.

Save the Children destaca que esta situación ha provocado situaciones “terribles” como niños con miembros amputados porque las clínicas no disponen del equipo necesario para tratarlos, bebés recién nacidos que mueren en las incubadoras por cortes de electricidad, pacientes que optan por que se les golpee con una barra de metal ante la falta de anestesia y padres que realizan transfusiones de sangre potencialmente mortales.

DE CRISIS HUMANITARIA A CRISIS DE SALUD

El director regional de Save the Children en Oriente Medio, Rogeer Hearn, destacó que la crisis humanitaria de Siria “se ha convertido rápidamente en una crisis de salud” y que “encontrar a un médico es una cuestión de suerte, encontrar a uno con el equipo y la medicación necesaria para dar tratamiento adecuado se ha convertido en algo casi imposible”.

“Todos los días nos encontramos con niños heridos que sufren quemaduras y fracturas muy graves. Necesitan operaciones complicadas, pero en este pequeño hospital no tenemos capacidad para llevarlas a cabo. A veces tenemos que amputarles un miembro para intentar salvarles la vida, porque, si no, morirían desangrados”, afirma un médico que trabaja en Siria.

Entre las consecuencias más preocupantes, Save the Children menciona la reaparición de enfermedades como la poliomielitis y el sarampión, que pueden desfigurar o paralizar de forma permanente e incluso matar. De hecho, considera “probable” que hasta 80.000 menores se hayan infectado “de la forma más agresiva” de poliomielitis y estén propagando la enfermedad.

La ONG recalcó que la mayoría de las dolencias que afectan a los niños en Siria son tratables y prevenibles en un correcto sistema de salud y subrayó que el sarampión, la diarrea y las enfermedades respiratorias están entre las que mayor mortalidad mundial causan entre menores de cinco años.

Además, destacó que unos 200.000 sirios, muchos de ellos niños, han muerto por enfermedades crónicas que tienen tratamiento, como el cáncer, el asma y la diabetes, lo que supone duplicar el número de víctimas mortales por la violencia.

Por ello, Save the Children exige una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para que se facilite de inmediato el acceso humanitario y los niños y sus familias puedan vacunarse y tener comida, agua y medicamentos.

(SERVIMEDIA)
10 Mar 2014
MGR/gja/caa